El proyecto para convertir el solar de la antigua fábrica de Cruzcampo en una nueva zona residencial sigue su curso, a pesar de que la crisis ha tumbado la pretensión de la antigua propietaria, Urvasco, de levantar un hotel de cinco estrellas y viviendas de renta libre y VPO diseñadas por cuatro de los arquitectos más reconocidos del mundo (Norman Foster, Isozaki, Nouvel y el sevillano Vázquez Consuegra). Hoy el consejo de gobierno de la Gerencia de Urbanismo aprobará inicialmente el Plan Especial de Reforma Interior del solar que albergará un proyecto menos pretencioso, pese a contar con una torre de viviendas de 23 plantas.
El titular del solar (con 20 hectáreas) es ahora la Compañía para los Desarrollos Inmobiliarios de la Ciudad de Híspalis SL, creada a finales de 2008 por ocho cajas de ahorros, entre ellas Caja España, Caixa Cataluña y Cajastur, a las que después se incorporaron Cajasur y Banco Popular. El responsable del proyecto aseguró a esta redacción que la planificación ya está lista y que ya sólo falta la aprobación del plan de reparcelación (con el que se distribuirán los usos entre los propietarios) para que arranque la urbanización de la zona, que tendrá una nueva calle que unirá El Greco con Ada. El objetivo de los nuevos gestores es que las obras comiencen a finales de año, si bien admiten no tener prisas para la comercialización. Y es que los bancos no explotarán el proyecto directamente, sino que lo venderán a promotores llegado el momento.
Eso sí, el nuevo mapa de la zona ha cambiado. Con la llegada de la crisis, Urvasco quiso que más de la mitad de las viviendas de su barrio de diseño fuesen de VPO y planteó al Ayuntamiento aumentarlas un 20%, de forma que de los 1.963 pisos previstos, 1.104 fuesen protegidos.
Compañía para los Desarrollos Inmobiliarios de la Ciudad de Híspalis, en cambio, no prevé, en principio, este aumento de pisos con alguna protección. En su Plan Especial recoge cuatro grandes manzanas abiertas a la zona verde (al norte), con frentes a la misma y con alturas máximas de 15 plantas. Tres de ellas para viviendas de renta libre y una, junto a la avenida del Greco, para VPO.
Al sur de este conjunto (separada por la nueva calle), se construirá otra línea de bloques de pisos de nueve plantas (uno de ellos, junto al Greco, para VPO), así como servicios terciarios que aprovechan en parte las instalaciones más significativas de la antigua fábrica cervecera.
Junto al viejo edificio, ya restaurado por la Fundación Cruzcampo, también se sitúan dos zonas para viviendas protegidas, así como una gran zona terciaria (para comercios, hoteles o restauración) y el principal hito del proyecto: un edificio singular de 23 plantas con frente hacia la avenida de Andalucía. La torre de viviendas más alta de Sevilla, ya que el rascacielos de Cajasol en la Cartuja -diseñado por César Pelli con 43 plantas- será para oficinas.
Al norte irá un parque con juegos infantiles, lago, zona con gradas, instalaciones deportivas y la biblioteca municipal central (con al menos 4.550 metros cuadrados), así como servicios terciarios en tres plantas de altura en el cruce de Ada con Tarso.
El proyecto de Urvasco con casi 2.000 viviendas, un hotel de cinco estrellas con 150 habitaciones, oficinas y zona comercial, un gran parque público e incluso un museo de la cerveza se presentó públicamente el 25 de septiembre de 2006 en el Ayuntamiento con la presencia de los arquitectos estrella, el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirin, y el presidente del grupo alavés, Antón Iráculis. Entonces se anunció que las obras empezarían en abril de 2008. Después, Urvasco apuntó que podría empezar no antes de 2010 (la inversión rondaba los 750 millones de euros).
Finalmente, el grupo alavés pagó sus deudas con los bancos con activos, como el solar de Nervión, un proyecto de renombre surgido a rebufo del éxito internacional del hotel Puerta América de Madrid.
