Cofradías

La cuadrilla más veterana

Los costaleros de Jesús Despojado promueven la edición de un calendario benéfico con fotos de los abuelos acogidos en el Hospital de la Santa Caridad haciéndose la ropa para contribuir al matenimiento de esta institución.

el 20 oct 2014 / 09:00 h.

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'Making off' del calendario benéfico de los costaleros de Jesús Despojado con los abuelos acogidos en el Hospital de la Santa Caridad. / El Correo 'Making off' del calendario benéfico de los costaleros de Jesús Despojado con los abuelos acogidos en el Hospital de la Santa Caridad. / El Correo   (FOTOGALERÍA. Calendario benéfico de los costaleros de Jesús Despojado) Si de aquí a unos días les ofrecen un calendario con fotografías de costaleros nonagenarios y bastón haciéndose la ropa, de abuelos igualando en sillas de ruedas o pasando lista atentos a las indicaciones de su capataz, no se sorprendan. Es el almanaque benéfico que los costaleros de la cuadrilla de Jesús Despojado han ideado para contribuir al mantenimiento de la Casa Hogar del Hospital de la Santa Caridad, en la calle Temprado, institución que a día de hoy acoge a unos 70 residentes de avanzada edad, cuya admisión se tramita con arreglo a baremos de pobreza y soledad. La idea era «realizar una acción lúdica que, al tiempo que sirviese de distracción a los propios internos, nos permitiera aportar nuestro granito de arena al mantenimiento del Hospital», explica Tomás Osuna, uno de los portavoces de la cuadrilla de Molviedro, cuyos componentes, unos 70 costaleros, colaboran estrechamente desde hace varios años con la Hermandad de la Santa Caridad en actividades de voluntariado y acompañamiento con los internos de su Casa Hogar. Fue así cómo surgió la iniciativa de editar un calendario benéfico con fotografías en las que los abuelos de la Santa Caridad –algunos impedidos bien por ceguera, por imposibilidad de locomoción o suma vejez– interactuasen con los costaleros de Jesús Despojado en acciones propias de una cuadrilla. Más de 450 instantáneas se tomaron durante la sesión fotográfica organizada expresamente el pasado 7 de octubre para este calendario, en las que los abuelos se prestaron voluntariamente a integrarse en una cuadrilla de costaleros bien haciéndose la ropa, fajándose, pasando lista, recibiendo los relevos de manos del capataz o incluso rezando ante los titulares. De la ristra de fotos que se realizaron ese día, solamente siete se pubicarán en el almanaque que saldrá a la venta a primeros de noviembre. «Acudimos a tres fotógrafos especialistas en temas de fotografía cofrade, José Ángel Milla, Ismael Pérez y Roque Larios, que han colaborado con nosotros y realizado su trabajo de manera altruista. Ello se encargarán de seleccionar y editar las fotografías que ilustrarán este calendario. El único gasto aparejado a esta iniciativa será la impresión de los calendarios», señala Tomás Osuna, más conocido entre sus compañeros de cuadrilla con el sobrenombre de el Triana. 'Making off' del calendario benéfico de los costaleros de Jesús Despojado con los abuelos acogidos en el Hospital de la Santa Caridad. / El Correo 'Making off' del calendario benéfico de los costaleros de Jesús Despojado con los abuelos acogidos en el Hospital de la Santa Caridad. / El Correo En total se imprimirán unos 400 calendarios cuya distribución y venta, a partir de la segunda semana de noviembre, se realizarán a través de la hermandad de Jesús Despojado, de la institución de la Santa Caridad y de diferentes grupos de costaleros de otras cofradías. «Todo lo que se recaude por su venta, estimamos que puede estar en torno a unos 2.000 euros, se destinarán íntegramente» al mantemiento del Hospital de la Santa Caridad. La directora del mismo, Esperanza Hernández, da fe de lo bien que se lo pasaron los internos haciendo de costaleros en la sesión fotográfica para este calendario. «Para ellos fue un festival. Se lo pasaron en grande. Cualquier actividad que se salga de la rutina y les sirva de entretenimiento y distracción es recibida allí con enorme alegría y entusiasmo», explica la máxima responsable del Hospital, donde son atendidos a día de hoy 70 abuelos con edades entre los 65 y los 95 años, «la edad que tiene el mayor», cuyo perfil responde siempre a tres requisitos básicos: «ser mayor de 65, el que no tengan familia que los puedan atender y su falta de recursos económicos, bien porque no tengan pensión o porque solo dispongan de la pensión mínima de 360 euros al mes». Además de un extraordinario grupo humano, la del misterio de Jesús Despojado es una cuadrilla comprometida con los que más lo necesitan. Encabezados por sus capataces, Rafael Quirós y Lolo Nieto, su estrecha vinculación con la institución promovida en el siglo XVII por el venerable Miguel de Mañara arrancó hace ya algunos años por razones de amistad compartida entre las direcciones de ambas entidades. Fruto de esta vinculación, todos los Domingos de Ramos los costaleros del Señor de Molviedro, ya uniformados para su briega bajo las trabajaderas, recogen en la calle Temprado a un grupo de abuelos, la mayoría impedidos, a los que acompañan en un recorrido matinal para mostrarles las hermandades del entorno del Arenal, comenzando por la de Jesús Despojado y continuando por cofradías como Montserrat, El Baratillo y Las Aguas. «A la hora de arrimar el hombro, no solamente lo hacemos bajo las trabajaderas. También somos costaleros de esos otros cristos vivos que son los residentes del Hospital», sentencia el Triana. El compromiso de este grupo de costaleros permanece todo el año, aunque se acrecienta especialmente en Cuaresma, con la recogida de alimentos no perecederos en cada uno de los cuatro ensayos fijados más la igualá, con sus visitas a los enfermos y con cuestaciones económicas entre los miembros de la cuadrilla que realizan «pasando un costal». Costaleros por caridad.

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