Redacción / J. R.
Sí quiero. La cúpula de Caja Castilla-La Mancha (CCM) respaldó ayer por unanimidad las negociaciones de fusión abiertas con Unicaja y, aunque señaló que el proceso será largo, mostró su ilusión por que concluya con éxito. Mientras, las críticas del PP manchego a la operación suben de tono.
El presidente de la CCM, Juan Pedro Hernández Moltó, dijo ayer que "realmente vemos con ilusión el proceso que empieza en estos momentos" hacia una integración con la entidad malagueña Unicaja. "Estamos convencidos de que este proceso es el que interesa a la región, a nuestros clientes, a nuestros impositores y, desde luego, también a nuestros empleados", comentó Hernández Moltó, tras recibir ayer el visto bueno para proseguir con las conversaciones, después de que la semana pasada jugara al despiste asegurando que había otras alternativas.
El consejo de administración de la CCM, reunido en su sede social en Cuenca, autorizó por "unanimidad" a su presidente a "continuar las conversaciones" con Unicaja de cara a una "posible integración de ambas entidades", apunta el escueto comunicado de la caja conquense.
El resultado de esas negociaciones, agrega, estará condicionado a los requisitos técnicos de viabilidad económica y financiera, a su aprobación por los órganos de gobierno de la CCM y a las autorizaciones de las administraciones públicas competentes, esto es, los Ejecutivos manchego y andaluz, el Ministerio de Economía -debe velar por la libre competencia- y el Banco de España.
Entre los quince miembros del consejo estaban los dos consejeros díscolos del PP, Germán Chamón y Tomás Martín-Peñato, a quienes el partido les ha abierto un expediente por no dimitir del consejo ante el rechazo de la formación política al modo con el que se está llevando a cabo el proceso.
En la reunión de ayer del consejo de administración de CCM, tomaron posesión los suplentes de otros dos consejeros del PP que sí dimitieron. Fuentes del PP indicaron a Efe que el partido "no se siente representado" por los dos miembros, por lo que no tiene que pronunciarse sobre su apoyo a la absorción prevista por Unicaja.
El consejo nombró, además, vicepresidente segundo a Ángel Nicolás, presidente de la Federación de Empresarios de Toledo (Fedeto), en sustitución del dimisionario presidente de los empresarios de Castilla-La Mancha, Jesús Bárcenas, responsable de la patronal española Cepyme.
Ya la pasada semana, el consejo de la caja malagueña autorizaba a su presidente, Braulio Medel, a negociar la operación con la CCM, lo hizo sin fisuras -por unanimidad, con el beneplácito de los consejeros populares- y, curiosamente, los términos expresados en su comunicado coinciden con los empleados por la conquense.
Pero fuentes de la entidad andaluza insisten en que la absorción -no será una mera fusión entre iguales- dependerá de las ayudas públicas que se arbitren por parte del Banco de España y del Gobierno central, y para ello es imprescindible conocer en detalle la situación real de las cuentas y balances de la entidad de Moltó. Y estos números los está echando el organismo del gobernador Miguel Ángel Fernández Ordóñez.
"Golferías". El Gobierno de Castilla-La Mancha, por boca de su portavoz, Isabel Rodríguez, manifestó su deseo de que si se produce la fusión, sea "positiva" para la comunidad. El Ejecutivo se pronunciará hoy en las Cortes regionales sobre el asunto.
En cambio, el PP regional denunció los "mangoneos" del presidente autonómico, José María Barreda, en la CCM con el objetivo de "hacer ricos a unos cuantos amigos" que, asegura, han puesto en peligro a la entidad.
La portavoz regional del PP, Carmen Riolobos, basó sus acusaciones en informaciones publicadas en los últimos meses y en rumores y opiniones de las que se deducen, afirmó, esos "mangoneos" y "golferías", e instó a Barreda a que dé explicaciones.
