Un título emblemático del hit-parade zarzuelístico llega mañana al Teatro de la Maestranza con posteriores funciones los días 21 y 22:La del manojo de rosas, de Pablo Sorozábal (1897-1988), en versión escénica de Emilio Sagi y dirección musical de Miguel Ángel Gómez Martínez. Se trata de un sainete lírico en dos actos y seis cuadros con libreto de Anselmo Cuadrado Carreño y Francisco Ramos de Castro que se estrenó en Madrid el 13 de noviembre de 1934.s una producción del Teatro de la Zarzuela.
Con más de 16 representaciones a sus espaldas sólo en su última reposición madrileña la producción es originalmente del Teatro de la Zarzuela, su director escénico no dudó ayer en calificar de «excepcional» un montaje en el que participa un equipo de creadores formado por Gerardo Trotti, en la escenografía; Alfonso barajas, en el vestuario; Eduardo Bravo, en la iluminación; y Goyo Montero, en la coreografía. Asimismo, el elenco de este obra para la que quedan entradas libres cuenta con la soprano Carmen Romeu, el barítono José Julián Frontal, el tenor Ricardo Bernal, el actor cómico Luis Varela, la soprano Ruth Iniesta y el tenor Carlos Crooke, además de la participación del Coro de la Asociación de Amigos del Teatro de la Maestranza y de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla a las órdenes de Gómez Martínez.
Este ensalzó ayer la «buena» calidad y relación entre libreto y música, que «no es que sea una música de gran profundidad pero su relación con lo que pasa en el escenario es inmejorable, lo que la convierte en una buena zarzuela», resaltó. Del mismo modo, el maestro granadino se refirió al daño que pueden causar montajes de zarzuela de poca calidad, «no haciendo justicia a la grandeza de este género», siendo esto «la causa primera de llevar a la zarzuela en ocasiones a una segunda categoría», lamentó, al tiempo que advirtió también «cierta culpa» en compositores, que ya en los siglos XVIII y XIX «menospreciaban a la zarzuela, despachándola como música de poca calidad».
Por su parte, Ruth Iniesta (en el rol de Clarita) y Carmen Romeu (en el de Ascensión) confesaron sus «ansias» por debutar en una sala tan importante como la del Teatro de la Maestranza, «enclave de referencia en el círculo lírico tanto nacional como internacional». Igualmente, Ricardo Bernal (Ricardo) relató su paso por Latinoamérica como cantante de zarzuela y puso de relevancia que allí «no es considerado como un género chico, sino todo lo contrario, ya que sus autores se consideran a la altura de los grandes y más prestigiosos compositores de ópera».
Por último, el actor cómico Luis Varela confesó «esa inquietud, que tiene todo buen actor antes de su actuación, de si la obra gustará o no», a pesar de haber representado esta zarzuela desde hace muchísimos años en repetidas ocasiones. También mostró «su satisfacción y compenetración» con todo el elenco, «haciendo de esta zarzuela otro éxito asegurado en el Teatro de la Maestranza de Sevilla».
