¿Es posible una alianza andaluza para la financiación autonómica? PP e IU han plasmado en sendos documentos los principios imprescindibles para el acuerdo y no hay escollos insalvables. Sólo el interés de la oposición por abordar en paralelo la financiación de los ayuntamientos o la deuda histórica puede abortar el pacto. El PSOE rechaza mezclar estos debates.
La cita aún no tiene fecha en la agenda pero será esta semana, aseguran los socialistas. El Gobierno y el PSOE andaluz confían en reunirse primero con el PP y después con IU. Serán las primeras reuniones, con intercambio de documentos, para formalizar una alianza en financiación autonómica que fortalezca la voz de Andalucía en la negociación nacional. Pero también, y ninguno de los dos partidos mayoritarios lo niega, éste podría ser un primer acuerdo clave para el consenso nacional. Es el termómetro que medirá si en las filas de la oposición hay voluntad de pactar este tema crucial.
PSOE y PP tendrían muy complicado cerrar un acuerdo en Andalucía y luego no reproducirlo en Madrid. En el Consejo de Política Fiscal y Financiera se sientan nueve comunidades gobernadas por el PP cuyo respaldo a la reforma del modelo de financiación es imprescindible. El Gobierno de Zapatero aboga por el consenso -aunque elude hablar de unanimidad, como exige el PP- para poner en marcha el nuevo sistema que definirá el reparto del dinero entre las autonomías.
El hecho de que los partidos mayoritarios en Andalucía no puedan jugar de forma autónoma respecto a sus direcciones nacionales pesa enormemente sobre la alianza andaluza, admiten fuentes de la negociación. Sobre el papel, con las propuestas que PP e IU han preparado para abordar la negociación, no hay ningún escollo insalvable.
La letra y la música de los principios defendidos por los populares y la federación de izquierdas coincide con la propuesta que la Junta de Andalucía envió al Gobierno en 2006 y que marcará las posiciones del PSOE-A. Acuerdo multilateral, igualdad, solidaridad, suficiencia, población, autonomía... son principios básicos que abrazan los tres partidos andaluces y que definen además el título de Hacienda del Estatuto que votaron a favor PSOE, PP e IU. Sobre el papel el acuerdo está casi hecho.
Las sombras aparecen cuando PP e IU condicionan la alianza en financiación autonómica a otros debates que exigen abordar en paralelo. Los populares ya han advertido de que la financiación de los ayuntamientos tiene que discutirse a la vez y reclaman una salida a las castigadas arcas municipales, cuyos números rojos se han disparado de la mano del parón inmobilario. El PP, que gobierna cinco de las ocho capitales andaluzas, puede enrocarse en este asunto. IU también pone como condiciones este debate y otro igualmente complicado, la deuda histórica. Los partidos también tienen pendiente cerrar su cuantificación antes de septiembre, fecha tope fijada por el Estatuto. Desde la dirección del PSOE andaluz dejan muy claro que estos tres asuntos están abiertos al diálogo y al consenso pero por separado. Temen que el tótum revolútum ponga palos en la rueda al acuerdo autonómico.
