En la última década, el Sevilla ha dado la alternativa a 35 chavales procedentes de los escalafones inferiores, aunque muy pocos de ellos han logrado consolidarse.
En las tres últimas temporadas debutaron ocho canteranos con el primer equipo. De ellos, tan sólo Antonio Luna tiene garantizada su continuidad en la actual plantilla.
El de Pedrera se estrenó en la 2009/10, al igual que Rodri, dando un buen rendimiento. Sin embargo, el lateral tuvo que marcharse cedido el año siguiente al Almería, mientras que el soriano fue traspasado al Barcelona para reforzar al filial azulgrana.
En la temporada 2010/11 debutaron Luis Alberto y Bernardo. El de San José del Valle, que ha jugado siete partidos en Primera, se ha marchado al Barça B, mientras que el central colombiano -sólo un partido en Primera con el Sevilla- sigue en el primer equipo sin que se descarte una nueva cesión, tras haber pasado el ejercicio anterior en el Racing.
La pasada temporada (2011/12) fueron cuatro los canteranos que tomaron la alternativa. Marcelino le dio la oportunidad a Campaña -integrante de la primera plantilla desde el verano de 2011- y a Hiroshi -en el derbi del Villamarín-. El japonés ha sido cedido ahora a un equipo belga de Segunda. Míchel, por su parte, confió en Deivid -cinco partidos-, aunque el canario se llevó luego la sorpresa de que no le renovaron el contrato. También debutó Alberto Moreno. Lo hizo en San Mamés; luego, regresó al filial.
Retrocediendo en el tiempo, de los 27 jugadores que debutaron con el primer equipo desde que comenzó la era Del Nido (mayo de 2002) y hasta la temporada 2009/10, sólo cuatro se han hecho un hueco en la plantilla, si bien dos de ellos, Fazio y Perotti, llegaron de Argentina directamente al filial y, por tanto, no completaron toda su formación en el club. Jesús Navas y Juan Cala son los otros dos.
Ahora, Campaña seguirá los pasos de jugadores como Diego Capel, Alejandro Alfaro, David Prieto, José Carlos, Rodri, Luis Alberto o Javi Varas, canteranos que han tenido que marcharse para poder jugar.
