La dimisión de un alto funcionario afín al vicepresidente de Argentina, Julio Cobos, cuyo voto derrotó en el Senado la ley de impuestos agrarios, profundizó ayer las fisuras en la Concertación política que había impulsado el peronismo para gobernar con amplio apoyo.
Se trata del subsecretario de Relaciones Institucionales de la Cancillería, Horacio Quiroga, quien decidió renunciar ante la "pérdida de confianza" entre la presidenta del país, la peronista Cristina Fernández, y Cobos, procedente del partido Radical. La llamada Concertación Plural que llevó a Cobos a compartir en 2007 la candidatura con Cristina Fernández fue impulsada por el ex presidente argentino Néstor Kirchner (2003-2007), esposo de la actual mandataria.
Pero en julio pasado, Cobos votó en el Senado en contra de un proyecto de ley para subir los impuestos agrarios presentado por el Gobierno con el fin de obtener el respaldo del Parlamento al plan que había aplicado por decreto en marzo y que motivó un conflicto de cuatro meses con el sector agropecuario.
"Me voy con frustración política (...) Es muy difícil participar de un gobierno que cree estar rodeado de traidores y golpistas, cuando alguien tiene una opinión distinta", sostuvo Quiroga. Este funcionario era considerado por los medios como el último "cobista" que aún permanecía en el Gobierno tras el rechazo parlamentario a la iniciativa oficial de subir significativamente los impuestos a la exportación de granos.
Por otra parte, los presidentes de Argentina, Cristina Fernández, y Venezuela, Hugo Chávez, viajarán hoya martes desde Buenos Aires a Bolivia para reunirse con su colega boliviano, Evo Morales. La entrevista tendrá lugar un día después del encuentro entre Fernández, Chávez y el mandatario de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.