El Banco de España calcula que la economía española creció un 0,2% en el último trimestre de 2010, con lo que acelera de forma moderada su ritmo de recuperación tras quedarse estancada entre julio y septiembre. Además, con las cifras disponibles hasta la fecha, estima que el Producto Interior Bruto (PIB) cayó menos de lo esperado con un 0,1%, aunque hay que recordar que este es un dato adelantado y, como tal , provisional.
Hace apenas tres días el Gobierno ya daba por hecho que el retroceso había sido del 0,2%, incluso una décima por debajo de la previsión incluida en los presupuestos del Estado de 2011. Lo que no cambia es que 2010 ha sido el segundo año consecutivo en el que España no ha crecido tras la fuerte contracción del 3,7% registrada en 2009.
"A pesar de este perfil de mejora gradual, el PIB descendió un 0,1 % en el conjunto de 2010, por el efecto del significativo retroceso de 2009", explica el Banco de España. Con todo, añade, "el débil avance de la actividad a lo largo del año pasado contrasta con registros más elevados en otros países de la zona euro, lo que pone de manifiesto el mayor alcance de la crisis en España y el impacto que el necesario proceso de ajuste está teniendo sobre las tasas de crecimiento a corto plazo.
Según informa la institución presidida por Miguel Fernández Ordóñez en su primer boletín económico de 2011, correspondiente a enero, "a lo largo de 2010, la economía española inició una senda de suave recuperación, sometida a algunas oscilaciones" que el supervisor atribuye a las medidas de ajuste del Gobierno, que condicionaron el gasto de las familias. Así, la demanda nacional retrocedió levemente (un 0,7% en tasa interanual), mientras que la aportación de la demanda exterior neta al PIB se incrementó en tres décimas, hasta un 1,3%.
En cuanto a la evolución del mercado laboral, el Banco de España afirma que "el tímido avance de la producción no fue suficiente para generar empleo neto, que continuó contrayéndose por décimo trimestre consecutivo, con un retroceso del 2,3 %". El sector que más afectó el paro fueron los servicios, pero también impulsó la tasa de la tasa de desempleo hasta el 20,33% con el que se acabó 2010 "las dificultades para generar puestos de trabajo del resto de actividades".
Sobre la inflación, que cerró enero en el 3,3% por el encarecimiento del petróleo, la institución prevé que este repunte sea "temporal". Según argumenta, porque una parte "significativa" del mismo obedece al impacto "transitorio" de algunas medidas impositivas, como la subida del IVA y del impuesto sobre el tabaco; y de alzas de determinados precios regulados, el caso del gas y electricidad.
