Llegó sonriente, de la mano de su mujer, haciendo declaraciones... Como en una jornada postelectoral (con victoria incluida). Pero, en realidad, Francisco Camps acudía ayer a los juzgados del Tribunal Superior de Justicia de Valencia a la primera jornada del proceso que se iniciaba ayer para resolver si efectivamente es culpable de un delito de cohecho continuado por aceptar, supuestamente, esos trajes de la empresa Orange Market.
A las 9.20 de la mañana, el expresident valenciano se presentaba en la sede judicial asegurando no sentirse "nervioso". Acompañado de su abogado, saludó a los compañeros que lo esperaban ya en la puerta -diputados y miembros del PPCV-. El diputado popular tuvo tiempo, además para dar la mano a algunos agentes de la Policía y medios gráficos.
Ricardo Costa, por su parte, tuvo una actitud más discreta. El exsecretario general del PPCV llegó un poco más tarde que Camps -sobre las 09.30 horas- en compañía únicamente de su abogado y sin realizar ninguna declaración antes de entrar en la sede judicial.
La mañana prometía, era el primer día del juicio de Camps. Casi un centenar de redactores, 20 fotógrafos y otras tantas cámaras de hasta 50 medios de comunicación se habían acreditado hasta el pasado viernes para cubrir el juicio del caso Gürtel.
Además, a las puertas de la sede judicial se agolpaban más de medio centenar de personas, algunas de ellas convocadas por el Col·lectiu contra la Corrupció, detrás de una gran pancarta en la que se podía leer el lema No a la corrupción, Camps dimisión. Otros esperaban al expresident con trajes con la etiqueta de ‘pagado', personas cubiertas con mascarillas sanitarias o caretas del movimiento de ‘anonymous'...
Sin embargo, el día fue para el jurado. La selección de las nueve personas que deben formar parte del tribunal popular que juzgará a Francisco Camps y al ex secretario general del PP valenciano Ricardo Costa por un presunto delito continuado de cohecho pasivo impropio comenzó a las 10.15 horas. Sin embargo, pasadas las nueve de la noche, con casi tres horas de receso para comer incluidas, el proceso no había finalizado.
Estos nueve elegidos, de las 29 personas que estaban citadas, serán los que decidan las dos partes tras una serie de entrevistas. Ellos serán los encargados de decidir sobre la culpabilidad o no de Camps y Costa y los que pondrán en marcha el proceso.
"absuelto". Por su parte, el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, destacó ayer que espera que Camps sea "absuelto" del juicio porque "es un amigo y compañero de partido", por lo que le deseó "lo mejor".
En este sentido, se manifestó Fabra, en respuesta a los periodistas en Madrid, momentos antes de asistir a la Junta Directiva Nacional del PP.
Asimismo, preguntado por si en el caso de que Camps sea absuelto debería volver a la política, Fabra indicó que es una decisión que debe tomar el propio Camps.
Además, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, afirmó que confía y ha confiado en la inocencia del expresidente valenciano "todos los días desde que comenzó esta barbaridad".
Para Barberá, quien ha manifestado que "siempre" ha creído en la inocencia de su "amigo" Camps y que sigue creyendo en ella, ahora ya "empieza el final", después de más de dos años.
Asimismo, aseguró que Camps "está sufriendo, como es natural", ya que lleva inmerso en este proceso más de dos años y medio. En la misma línea, la alcaldesa popular señaló que es "es digno de toda admiración por la fortaleza que tiene, ante tanta barbaridad".