Pilar Campos (Arjona, Jaén, 1966) y David Carrasco, licenciados ambos en Bellas Artes, fundaron hace once años BPS Aldiseño, una firma que aplica la creatividad y el diseño a los diferentes servicios que presta, que van desde la creación de una imagen corporativa hasta el diseño editorial, pasando por la fotografía o la creación de páginas web. A pesar de la crisis, consigue mantenerse gracias a la adaptación obligada a la que no sólo le ha llevado la coyuntura, sino los nuevos formatos.
-Muchas empresas están recortando precisamente en imagen corporativa en estos tiempos, lo que redunda en su negocio. ¿Qué le diría a esos empresarios que descuidan la marca?
-Cuidar la imagen no es un gasto sino una inversión. Hay que ser muy visible, ahora más que nunca. Publicitar nuestra empresa, mostrar nuestros productos o servicios es una necesidad, no un lujo, y es obligatorio hacerlo de la mejor manera posible, sobre todo creativa y no tiene que ser costosa ni debe serlo.
-¿Qué ramas toca BPS Aldiseño?
-Nuestro fuerte es la creatividad, es lo que nos diferencia, y la aplicamos en diseño gráfico, publicitario, comunicación, fotografía, vídeo, página web, blogs... Aplicamos el diseño y la creatividad a cualquier soporte, al principio en papel y ahora sobre todo en digital.
-¿Cuál es la que más se ve afectada por la crisis?
-La del diseño editorial. Hace tiempo que nuestros trabajos no llegan a la imprenta, un sector muy afectado. Nosotros seguimos trabajando porque ofrecemos su versión multimedia.
-Han elaborado trabajos tantos para el sector público como el privado. ¿Dónde nota más la caída del negocio?
-Hemos trabajado mayoritariamente para la Administración, y después se han sucedido los encargos uno tras otro, es decir, un cliente nos ha llevado a otro. Apenas hemos hecho publicidad. Hasta hace muy poco estábamos casi desbordados. La demanda ha disminuido desde que comenzó este año y como somos una empresa pequeña, sin grandes infraestructuras, seguimos aquí, nos mantenemos.
-¿Por qué se decide a montar una empresa como la suya?
-Los motivos son mi inquietud por ser libre en mis decisiones, mi pasión por el trabajo creativo que realiza mi socio, vender lo que él hace, participar en ese producto o proyecto, quedarme entre bastidores y ver cómo se cumplen los objetivos de nuestra clientela. Me entusiasma cuando me llaman para decirme: "Pilar, como ya te puedes imaginar esto es urgente, crees que podríamos tener o hacer... ¿Cómo lo ves?". Oír el suspiro cuando les respondo (eso que ellos y ellas saben): "Espera, déjame que piense... es posible si lo hacemos de esta manera...". Es una satisfacción para mí, a veces, también adrenalina.
-¿Cuál ha sido la evolución desde su nacimiento?
-Ha evolucionado sobre todo el soporte. Hace once años introducíamos nuestras fotografías digitales en nuestros diseños. Cuando creamos la empresa David y yo, imprimíamos las presentaciones. Ahora las enviamos vía mail, web, nube, blogs, smartphones... El equipo se completó hace cinco años con Yria y Martín. Los cuatro abarcamos todo: dibujo, diseño, fotografía, sector audiovisual, web, multimedia, eventos, plan de comunicación, redes sociales... Todo ello aplicado con creatividad y profesionalidad. Ser un equipo resolutivo y cumplidor nos ha dado credibilidad y ha hecho que nos confíen proyectos de muy diversa índole.
-¿Cómo definiría la situación que vive su sector?
-Como en todos, en tiempos de bonanza abundaban los estudios de diseño y comunicación, había dinero para gastar y muchos cursos de diseño que proporcionaban ingresos a quienes lo realizaban, pero a medida que han recortado gastos han ido cerrando. Menos demanda, menos oferta. Cuando se pretende rentabilizar la inversión, buscas lo mejor, lo cual es extensible a cualquier sector y en cualquier parte, en Sevilla, en Andalucía o cualquier ámbito.
-¿Cómo está el panorama en Sevilla?
-Ahora debemos ser mejores, trabajar más por menos, adaptarnos al momento que vivimos, a los nuevos medios de comunicación, rediseñarnos, lo que puede ser una oportunidad de negocio para mi sector. Esto es la vida empresarial. Estar en movimiento, no parar, pensar qué, dónde, cómo ofrecer lo que sabes y te gusta hacer... es lo que hace que ser empresaria sea una aventura. El cambio puede dar miedo, pero es apasionante y motivador.
-¿Han realizado proyectos en el exterior?
-Sí, hemos trabajado para entidades de Europa, pero ha sido a raíz de nuestra clientela, que además de ser fiel nos proporciona nuevos contactos.
-¿Cuáles son sus principales clientes?
-Son personas que aprecian el valor de la imagen, en el sector público o privado, y nuestro mayor tesoro, ya que forman parte de nuestra vida. Trabajamos mucho con la Administración, es una ventaja de Sevilla.
-¿Y los trabajos más importantes que ha afrontado?
-Todos están al mismo nivel, desde una tarjeta de visita hasta un evento internacional transmitido en directo. Para mi equipo debe ser igual de importante como lo es para nuestra clientela y directamente proporcional a su satisfacción con buen resultado.
-¿Qué importancia juega internet en una empresa como la suya?
-Es fundamental para comunicarnos, la base para despegar y trasladarnos allí donde esté o pueda estar nuestra clientela. Nos abre al mundo y nos permite explorar y utilizar los medios que brinda. Es un medio de comunicación para todas las empresas. Debemos usarlo para nuestro beneficio, para generar nuevas oportunidades de negocio, lo cual es válido para cualquier firma de cualquier sector. Tenemos que aprovechar lo que nos proporciona y para mi equipo es un soporte donde plasmar nuestros conocimientos.
-¿Cuál es el futuro que prevé para el sector en el que desenvuelve su actividad?
-Para el sector creativo siempre habrá un hueco en el mercado. Habrá que encontrar ese nicho, estar donde se necesite, tener el don de la oportunidad, encontrarnos con esas personas que valoran la imagen, dar forma a sus ideas, ayudarlas a expresarse y dar sus proyectos a conocer. Para nuestro sector es importante adaptarse continuamente a los nuevos soportes y mejor aún: anticiparse.
