El Gobierno quiere echar el cerrojo a una de las principales puertas de entrada de droga a la península como es la desembocadura del río Guadalquivir, en Sanlúcar. En los dos últimos años el hachís detectado en esta zona ha aumentado en un 600%, por lo que el Gobierno creará un tercer Grupo de Respuesta Especial contra el Crimen Organizado (Greco).
El Ministerio del Interior tiene previsto aprobar la creación en la provincia de un tercer Grupo de Respuesta Especial contra el Crimen Organizado (Greco) que se sumará a los que ya operan en Chiclana y Algeciras. Son unidades de la Policía Nacional especializadas en el blanqueo de capitales y en captar a las mafias que se benefician de la droga. Cádiz será la única provincia española en la que trabajen tres grupos de este tipo. Así lo anunció ayer la diputada socialista, Mamen Sánchez, quien insistió en que esta medida, que está en fase de estudio, "pone en evidencia la apuesta del gobierno socialista de lucha contra el narcotráfico".
Si bien el trabajo de estos grupos en la provincia ha sido valorado muy positivamente por el Ejecutivo, no han podido frenar la situación en Sanlúcar. Los datos hablan por sí solos. Hasta el mes de septiembre se habían aprehendido en la desembocadura del río 63.000 kilos de hachís. De esta forma, las fuerzas y cuerpos de seguridad han podido constatar que la actividad del narcotráfico se ha trasladado a este municipio. Se ha multiplicado el número de alijos y, al mismo tiempo, su volumen porque los contrabandistas tienden a llevar cada vez más kilos de droga en sus embarcaciones.
Toda esta actividad ha propiciado también un aumento considerable del número de casos que llega a los tribunales. La fiscal Antidroga, Ana Villagómez, señaló que solicitará el nombramiento de una tercera Fiscalía de su misma área que trabaje codo con codo con ella, que opera en Cádiz, y con su homólogo en Algeciras. Considera que el nuevo fiscal debería trabajar en Jerez, donde podría controlar también el incremento de la venta de cocaína que asegura que se está produciendo en esta localidad gaditana.
Una de las causas que justifican la entrada de droga por Sanlúcar es, según Villagómez, la falta de una estación fija del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior, ya que hasta ahora sólo cuenta con una torre móvil. Esta carencia ya ha tenido respuesta por parte del Gobierno, que tiene previsto instalar en breve una nueva delegación del SIVE para controlar la entrada de embarcaciones en la zona.
La fiscal también considera que las características del terreno hacen más fácil el trabajo a los narcos. "Se detecta con mayor dificultad la entrada de cualquier embarcación. En la zona hay numerosos barcos de pesca y también es muy difícil las persecuciones de estas lanchas si van río adentro, puesto que existen muchas zonas ocultas de vegetación", explicó.