"Era un mero instrumento de su marido". Esa es la conclusión a la que han llegado los abogados de los denunciantes de Contsa tras oír la declaración de la esposa de José Salas, presidente de la entidad declarada en concurso mercantil (la antigua suspensión de pagos).
María del Carmen B.D. aseguró en el Juzgado de Instrucción número 17 que se limitaba a "firmar las escrituras de las empresas a su nombre sin leerlas y sin que tampoco se la leyera el notario", según los letrados de la acusación.
La esposa de Salas, cuya declaración se había aplazado por un intento de suicidio, acudió al juzgado muy demacrada, ya que ha perdido mucho peso tras haber sido imputada por la juez como cooperadora en los cuatro delitos societarios, por los que su esposo se encuentra en prisión desde el pasado 3 de octubre. Es más, a la media hora de iniciarse la declaración fue necesario hacer un receso porque no podía continuar por una crisis nerviosa, tras la que ya no quiso declarar.
La mujer de Salas explicó que no entraba en el despacho de la notaría, sino que esperaba fuera a que su marido la llamara. "Ella entraba cuando ya estaba todo listo para firmar", explicaron los letrados, e incluso llegó a decirle a su marido "que no quería problemas", a lo que éste le respondía que "no iba a tener líos". Además, alegó que no tiene formación empresarial, pues sólo cuenta con la EGB, y que el único negocio que ha tenido ha sido "una tienda de medias en el Centro, que cerró para ocuparse de sus hijos".
El Ministerio Fiscal también la interrogó sobre los 3,5 millones de euros que tenía en su cuenta, cuyo IRPF no declaró Hacienda y que ha originado una nueva querella de la Fiscalía por un presunto fraude fiscal, a lo que contestó que desconocía de su existencia.
Precisamente, el Juzgado de Instrucción número 8 la ha citado a declarar por este nuevo delito el 1 de diciembre, aunque se suspenderá porque ese día su letrado tiene juicio. Por su parte, Salas también ha sido imputado por este mismo delito, ya que él poseía otros tres millones de euros, pero esta denuncia la tramita el Juzgado de Instrucción número 10.
También fue interrogada por la venta de varias decenas de inmuebles desde el verano, pese a que la empresa ya estaba sujeta al concurso mercantil y, por tanto, sería un presunto delito de alzamiento de bienes, aunque también dijo que desconocía la venta.
Por otro lado, el letrado de Salas anunció que va a denunciar a Miguel López Lora -uno de los afectados que le llevó a los tribunales- por fraude fiscal, aunque su letrado va ampliar la denuncia al entorno de Salas y va a pedir que éste declare de nuevo por los nuevos hechos que se están destapando. La juez también ha aceptado la imputación de seis personas más, entre ellas el presidente de la asociación de afectados de Contsa.
