Por segundo año consecutivo, Sevilla volverá a tener un nuevo monumento en el Paseo Colón inaugurado en un día de Corpus Christi. Si el año pasado era la estatua a la madre del Rey Juan Carlos I de España, la Condesa de Barcelona, montando a caballo la que quedaba expuesta junto a la plaza de toros de la Maestranza, este año le toca el turno a la tan esperada imagen del torero del barrio de San Bernardo Manolo Vázquez (1930-2005), después de que se concluyera el año pasado.
A falta de la confirmación de las autoridades asistentes y de la hora, la colocación del monumento al que fuera apodado como el brujo de San Bernardo se realizará el próximo jueves 11 de junio, día de dicha celebración eucarística, en la "margen más cercana al río", según ha acordado la Gerencia de Urbanismo.
La escultura ha sido realizada por el imaginero Luis Álvarez Duarte. Está bañada en bronce y tiene una altura de 1,80 metros, sin contar la del pedestal en el que irá instalada. Según ha explicado Álvarez Duarte, "la estatua representa a Manolo citando un natural, precisamente en su última corrida lidiada en Bilbao". Sin duda Vázquez era muy amigo del escultor, lo que ha provocado que Álvarez Duarte le haya puesto "más cariño" a la obra. Pero eso sí, "después de esta estatua me cortaré la coleta y no realizaré otra que no sea de imaginería sacra".
Por su parte, Manuel Vázquez, hijo del torero, ha comentado sobre la noticia de la colocación definitiva del monumento que homenajeará a su padre que "en la familia esperábamos con mucha ilusión que, después de un año, se pusiera la estatua".
Además, el primogénito de Vázquez, ha puntualizado que seguramente será un día "muy bonito, porque además se trata de una fecha muy sevillana, que a mi padre le encantaba. Sobre todo por aquella tarde de Corpus de 1981, cuando salió por la Puerta del Príncipe.
La escultura ha quedado muy bonita, porque Luis -refiriéndose al artista-, además de ser un magnífico imaginero le ha puesto mucho mimo". Se trata de una obra, para la que incluso Manolo Vázquez llegó a posar en vida, y vio el boceto finalizado.
