Producción de acero corrugado en Siderúrgica Sevillana.
A pesar de que la crisis está haciendo estragos en la industria española, la empresa Siderúrgica Sevillana SA, con sede en Alcalá de Guadaíra, y que se dedica al reciclado de chatarra para la obtención de acero corrugado, está manteniendo el tipo hasta el punto de que en 2012 facturó 347,10 millones de euros frente a los 336,37 millones de euros de 2011, es decir, su facturación creció en un 3,1%.
Asimismo, también subió su producción en un 4%, al pasar de las 676.000 toneladas de 2011 a las 703.000 toneladas de 2012. Y lo que es aún mejor, su plantilla no sólo no se mantuvo, sino que se incrementó levemente: 27 operarios nuevos ingresaron en la nómina de esta empresa, hasta alcanzar los 703 trabajadores.
No obstante, y a pesar de estos datos aparentemente buenos, el director gerente de esta metalúrgica, Mauro Pozzi, advirtió ayer de que la empresa tiene un expediente de regulación de empleo (ERE) aprobado, que no ha entrado en vigor, y del que dijo que espera que no se tenga que aplicar.
De esta supervivencia, Pozzi culpó a que esta sociedad entre 2004 y 2007 no se embarcó en una expansión como hicieron otras empresas del sector, nos hicieron más pequeños, pero remarcó que gracias a esta contención siguen funcionando a diferencia de otras siderúrgicas que han tenido que cerrar.
Su materia prima, la chatarra, procede en un 50% de España y en el otro 50% del exterior, mientras que el 70% del acero corrugado que produce esta empresa se exporta al mercado internacional como Portugal y el Norte de África, donde competimos con empresas de antiguos países del Este, de Turquía y de China, informó Pozzi.
Estos datos se dieron a conocer ayer durante una visita realizada a Siderúrgica Sevillana para dar a conocer el proceso del reciclado del acero y la apuesta por la sostenibilidad que realizan las empresas del sector.
Y como muestra un botón: Siderúrgica Sevillana fue la primera empresa en encapsular el horno eléctrico, una de las primeras haber obtenido la Autorización Ambiental Integradas (AAI), además de tener el certificado de Sontenibilidad Siderúrgica y haber sido galardonada con la marca Suststeel.
De hecho, esta empresa destaca por sus políticas de sostenibilidad en las que ha realizado grandes inversiones, en su control de vigilancia radiológica y en el bajo consumo de agua en su proceso de producción, al emplear una media de 600 litros por tonelada de acero frente a los aproximadamente 1.500 litros de agua que consume la industria europea en el mismo proceso.
Esta apuesta por la innovación se hace más que evidente al visitar la factoría, las medidas de seguridad son máximas y todo el proceso de producción se hace por medio de ordenadores, desde una sala donde todo se controla por medio de pantallas, mientras que los operarios que están a pie de obra se encuentran aislados. Otro detalle, es que el consumo eléctrico se realiza cuando menos lo requiere la población civil.
