Todo apuntaba a que la reunión mantenida ayer entre Junta, sindicatos y el administrador se saldaría con un horizonte algo más despejado para Astilleros de Sevilla, pero finalmente no pudo ser así. El encuentro, en el que se confiaba que se pudiera cerrar una fecha para devolver la actividad a los tres buques que la empresa naval tiene aún en cartera, no llegó a ningún puerto, con lo que las partes se emplazaron a una nueva reunión prevista para el próximo día 24.
Fuentes conocedoras de la negociación precisaron ayer que "no se daban las condiciones" para rubricar ningún acuerdo, toda vez que no se ha puesto sobre la mesa ningún compromiso para desbloquear el problema de la financiación, que es el que mantiene paralizados los tres buques que constituyen la carga de trabajo de la firma naval, y que, una vez solucionado, permitiría reanudar la actividad industrial pese a estar imbuido en un proceso concursal.
Las fuentes mostraron su temor a no alcanzar un acuerdo antes de que finalice el plazo para que los administradores concursales presenten su informe y tomen una decisión acerca del expediente de regulación de empleo (ERE) de carácter extintivo que afecta a los trabajadores procedentes de la extinta Izar.
Así pues, algo más de 80 puestos de trabajo han sido extinguidos, mientras que hay otros 99 que también se incluyen en ese grupo. La intención de los trabajadores es que la ejecución del citado ERE vaya acompañada de otras medidas que supongan la vuelta de la actividad a la factoría del astillero, en vistas de que la búsqueda de un proyecto empresarial que reflote la empresa y sanee su situación financiera se encuentra completamente estancado, pese a los mensajes de la Junta de que sigue buscando un socio inversor.
La reunión mantenida ayer se prolongó por espacio de cinco horas sin resultado, aunque ahora la prioridad para los trabajadores no es la movilización, sino tratar de que se despeje el escollo de la financiación, paso imprescindible para tratar de apuntalar que siga habiendo actividad en el futuro, y poder entregar los barcos pendientes a los armadores, momento en el que se recuperaría el dinero adelantado.
Tanto la Junta como el administrador único de Astilleros han reclamado algo más de tiempo para ver si pueden conseguir ese objetivo, aunque de momento todo queda igual. En un principio, los trabajadores esperaban arrancar el compromiso de poner fecha a la reactivación de la carga de trabajo "antes del 4 de marzo".
En la mesa negociadora estuvieron presentes representantes de las Consejerías de Empleo y de Economía, Innovación y Ciencia, el administrador único del astillero y los sindicatos Comisiones y UGT. En este proceso de negociación, la Junta de Andalucía ha asegurado siempre que el futuro de Astilleros está ligado a nuevos socios.
