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La financiación entra en el descuento

El Gobierno aspira a cerrar el nuevo modelo de financiación autonómica antes del próximo año pese a la crisis. En dos semanas presentará un nuevo documento tras cerrar la segunda ronda con las comunidades. Chaves confió en que se estrene modelo en 2009.

el 15 sep 2009 / 17:59 h.

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El Gobierno aspira a cerrar el nuevo modelo de financiación autonómica antes del próximo año pese a la crisis. En dos semanas presentará un nuevo documento tras cerrar la segunda ronda con las comunidades. Chaves confió en que se estrene modelo en 2009.

La próxima semana el Ministerio de Economía espera tener un encuentro con la Junta de Andalucía dentro de la ronda de contactos que desde mediados de octubre viene celebrando la Secretaría General de Financiación Territorial. "Las conversaciones han estado abiertas con el Gobierno andaluz como con el resto", aseguraron ayer fuentes del Ministerio de Pedro Solbes. El teléfono, advierten, ha sido clave en la negociación retomada tras el verano y que, aseguran, no ha estado aparcada por la crisis o el Presupuesto, aunque el foco haya estado en esos otros asuntos.

A diferencia de la primera fase, que concluyó en julio con un primer documento del Gobierno, la segunda ronda ha sido "más discreta". La cita con la Junta, señalan desde el Gobierno, "no necesariamente" tendrá que pasar por una comisión mixta. Esta semana se han reunido con Murcia.

Retroactivo . El Ministerio ha recabado propuestas de las comunidades y a partir de ahí concretará su oferta. La intención es, tras un lustro con la guerra por el dinero abierta, cerrar las bases de un acuerdo "antes del 31 de diciembre". No dará tiempo a que el Presupuesto contemple el nuevo modelo pero "se habilitará un crédito extraordinario para cubrirlo", explicó el Ministerio.

Tras cerrar un acuerdo, se tienen que modificar la Ley de Financiación de las Comunidades (Lofca). Enero es inhábil para las Cortes por lo que la reforma tendría que esperar. "El compromiso es que sea cual sea la fecha en la que se apruebe la ley, el modelo se aplicará con carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2009", aseguró el Gobierno. Y, en plena crisis, ¿de dónde saldrán esos fondos extra para las comunidades? El Gobierno propone ir a una "implantación gradual" del futuro sistema, en función de la disponibilidad presupuestaria y demanda comprensión a las autonomías.

El presidente de la Junta, Manuel Chaves, aseguró ayer -en una entrevista en RNE-, que "el 31 de diciembre es una buena fecha" para llegar al acuerdo y confió en que éste sea "plural" y acorde a los intereses de todas las autonomías. "Espero que todos hagamos el esfuerzo de llegar a un punto de encuentro", agregó. Sus declaraciones se produjeron un día después de que el presidente catalán, José Montilla, se reuniera con Zapatero y sellaran pactar la financiación antes de final de año.

Las comunidades comparten criterios básicos. La batalla llega al traducir a euros esos principios y al abordar la solidaridad. Hay consenso en que la población sea la base y en que urge actualizarla porque desde 1999 España ha crecido en 6 millones. La inmigración se ha reflejado en el censo, sobre todo en Baleares, Cataluña, Valencia o Madrid. El problema llega al ponderar esa población. Las comunidades con más mayores quieren que el envejecimiento compute, lo mismo que la dispersión geográfica o la población con edad escolar.

El vicepresidente segundo y consejero de Economía, José Antonio Griñán, está convencido de que se estrenará modelo en 2009 pero advirtió de que "cualquier cambio que se haga adaptando el modelo a la población actual significa que Andalucía perdería medio punto de participación en el sistema y eso es mucho dinero".

La Junta exige que la población menor de 15 años compute más para sufragar gastos educativos. Griñán mostró su malestar porque el PP esté "todo el día dándole a la matraca de la población" cuando Andalucía ha crecido menos que la media. "Estoy convencido de que el PP le está haciendo el trabajo sucio en Andalucía a la señora Aguirre y el señor Camps", lamentó.

El Gobierno central se comprometió a pagar parte de la deuda histórica antes de cerrar la financiación. La Junta dijo que no suscribiría el modelo sin cobrar.

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