El real decreto que regula el acceso a la Universidad, aprobado por el Consejo de Ministros hace cuatro días, puede "distorsionar" las expectativas de los alumnos andaluces de Bachillerato para estudiar la carrera que quieren, según la Consejería de Economía e Innovación, porque "la norma pondrá por delante a muchos titulados de FP". Los alumnos de Bachillerato y de FP con título de grado superior concurren por primera vez este año en el mismo cupo general, y por tanto competirán entre sí por la misma carrera. Hasta ahora era distinto: la FP concurría en un cupo de reserva, separado de los bachilleres y con límite de plazas (30% en diplomados y arquitectos o ingenieros técnicos, y 7% en arquitecto, ingeniero o licenciado).
La nueva ley dice que "se establecerá un acceso preferente mediante la adscripción de cada uno de los títulos de FP a las carreras", y esa "preferencia" ha puesto nerviosos a muchos institutos de Bachillerato. El área de Innovación, responsable en materia universitaria, teme que "en algunas carreras se cuelen muchos alumnos de FP y desplacen a los aspirantes de Bachillerato".
Los técnicos de FP no están obligados a hacer la selectividad. Acceden a la Universidad sólo con la nota media de su ciclo formativo que, estadísticamente, es superior a la media de los alumnos de Bachillerato. Estos, en cambio, sí tienen que examinarse de la prueba de acceso, y eso les resta opciones frente a los aspirantes de FP, porque los resultados de selectividad tiran hacia abajo de la nota media que lograron en el 2o curso de Bachillerato. "Manejamos estadísticas claras que nos dicen que los de Bachillerato podrían verse resentidos con esta selectividad. En los últimos 15 años, la media de los técnicos de FP para entrar en la Universidad ha estado por encima de las notas con las que los bachilleres aspiran a una carrera, sobre todo en las ramas técnicas y sanitarias", aseguran en la Junta.
De modo que los estudiantes de FP con título de Enfermería tendrán preferencia para entrar en Medicina, un perito podría acceder antes a Arquitectura y a un técnico le será más fácil estudiar Aeronáutica. El secretario general de Universidades se ha negado, en repetidas ocasiones, a aclarar a este periódico qué efecto tendrá la nueva selectividad en Andalucía y si desequilibrará el alumnado de FP y Bachillerato en algunas carreras.
prueba. La intención del ministerio es "flexibilizar el sistema e integrar la FP en la Universidad", de manera que el Bachillerato dejará de ser considerado el único curso preuniversitario. El ministro Ángel Gabilondo quiere que cale que un ciclo formativo de FP de grado superior sea considerado igual que una licenciatura universitaria. "Con esta nueva selectividad se diluyen las diferencias que había entre alumnos de FP y de Bachillerato. Esto va a nivelar mucho más las oportunidades", explican en el ministerio. El último cambio que se introdujo en el real decreto el viernes también privilegia a los de FP, porque les permitirá presentarse a la prueba específica de selectividad para subir su nota media si lo desean -algo que hasta ahora sólo podían hacer los de Bachillerato-.
A pesar de todo, la Junta y las universidades andaluzas han tratado de reequilibrar las opciones de los aspirantes, ponderando las notas de Bachillerato por encima de las de FP. Cuando un estudiante aspira a entrar en una carrera, la universidad pondera las notas de sus exámenes en la prueba específica. Por ejemplo, si la Hispalense quiere alumnos de Medicina con un alto nivel de Estadísticas, ponderará al máximo esa materia. Los porcentajes de ponderación están entre 0,10 y 0,20, y es cada universidad la que decide qué materias pondera al alza y cuáles a la baja. En Andalucía, se pretende valorar al alza las materias de Bachillerato sobre las de FP, y así reequilibrar las opciones. Con todo, reconocen que los de FP seguirán teniendo más facilidad para lograr plaza en las carreras más demandadas.
