La secretaria general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, dijo ayer que los problemas de salud mental y, sobre todo, las drogas, se encuentran detrás de la comisión de muchos delitos.
Gallizo ha participado en la Jornada sobre Patología Dual, que reúne en Alcázar de San Juan a profesionales de las prisiones de Castilla-La Mancha para debatir la situación y buscar soluciones a este problema, "que es uno de las más importantes en el ámbito penitenciario", ha dicho.
Según Gallizo, acertar con los tratamientos para atajar los problemas de aquellos internos que consumen drogas también contribuirá a mejorar la seguridad de la sociedad en general, en tanto en cuanto "la función de las cárceles es que los presos vuelvan a insertarse socialmente".
Hay que tener en cuenta, ha continuado, que las cárceles españolas "tienen un altísimo nivel de drogodependientes, que están en prisión por esta causa, por delitos relacionados con el tráfico de drogas a pequeña escala o bien por robos cometidos para procurársela, y es necesario que existan estrategias para abordar este problema".
Además, ha añadido, "la cárcel se convierte con frecuencia en el único recurso asistencial que tienen personas con patologías importantes, previas a la comisión de delitos".
Junto a las drogas, es preocupante la gran cantidad de enfermos mentales "que tenemos en prisión, aunque en muchos de los casos son consecuencia directa del consumo de sustancias adictivas durante muchos años".
Mercedes Gallizo ha agradecido la colaboración de otras entidades e instituciones en la organización de este tipo de jornadas, como la Fundación Atenea y la Consejería de Salud de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Además, ha destacado la buena disposición que muestra la ciudad de Alcázar de San Juan hacia su prisión, "que es uno de los espacios de seguridad con los que cuenta la sociedad, pero que no siempre se ve así en todos los municipios, ya que con frecuencia se ve como un problema".
Por su parte, el director general de Ordenación y Evaluación de la Consejería de Salud, José Luis López Hernández, ha recordado que hace 10 años que esta institución firmó un convenio con el Ministerio del Interior para la atención a los drogodependientes en las prisiones de la región, y que se suscribió previa petición de los directores de las mismas.
A juicio de López Hernández, el trabajo que se ha realizado a través de la Fundación Atenea "ha sido magnífico, pero ahora se tendrán que realizar algunas modificaciones en función de los cambios que se han producido en el consumo de droga".
Ha explicado que, si hace diez años la heroína era el problema fundamental, ahora el mayor consumo es el de cocaína y, asociados a la misma, van los problemas de salud mental conocidos como patología dual.
