Pedro Miño (Madrid, 1979) ha decidido lanzarse a la piscina del emprendimiento en plena crisis con un proyecto relacionado con un deporte desconocido para muchos: el parkour. Así, ha puesto en marcha una instalación de más de 1.000 metros cuadrados para practicar esta disciplina, consistente en el desplazamiento a partir de las condiciones y habilidades físicas del cuerpo humano, superando y sorteando los obstáculos del recorrido de la manera más ágil y fluida posible. Es el primer gimnasio de este tipo existente en España y cuenta entre los socios de la cooperativa con uno de los deportistas más reconocidos en el mundo del parkour, Daniel Barragán, conocido como El Flecha. El promotor de esta iniciativa asegura que el componente social es el potencial de Universo Parkour.
-El parkour es una actividad desconocida por la gran mayoría de la sociedad. ¿Por qué decide montar su negocio sobre este deporte?
-Me dedico desde hace años a montar eventos sobre temas sociales y culturales, sobre todo relacionados con los más jóvenes. Hace dos o tres años conocí al colectivo que hacía parkour en Sevilla y organizamos una quedada, RT, como se denomina en el lenguaje que usan los que lo practican. Eso fue hace tres años en el paseo del río y asistieron más de 300 personas, por lo que tuvo mucho éxito. A partir de entonces mantuve relación con los más inquietos de este colectivo y hace un año nos sentamos para estudiar cómo poner en marcha un proyecto relacionado con el parkour.
-¿Qué es exactamente Universo Parkour?
-Hemos creado una especie de gimnasio, aunque no es el término más adecuado para referirse a nuestro espacio porque difiere mucho de los convencionales. Es un centro de iniciación y de entrenamiento, así como un lugar de referencia social entre los que practican parkour. Hicimos un plan de empresa y vimos que era sostenible, por eso decidimos lanzarnos. Nos hemos constituido como cooperativa en la que estamos cinco socios, tres de ellos menores de 25 años. Es un equipo joven y es el primer centro de este tipo de España, donde además se practican el freerunning y el tricking, que fusionan en el parkour otro tipo de disciplinas como la gimnasia deportiva, las acrobacias o las artes marciales.
-¿Cómo surge esta actividad deportiva?
-Nace en Francia en los años 90. De hecho, parkour es una palabra francesa que significa recorrido. La filosofía es desplazarse de un lado a otro evitando los obstáculos, es el arte del desplazamiento. Es muy social, una especie de gimnasia deportiva urbana. Se extendió por toda Europa, especialmente por Inglaterra y allí es donde surge el freerunning, que es recrearse en los obstáculos para hacer acrobacias. El tricking surge después, y es la disciplina que incorpora artes marciales.
-¿Qué diferencia a Universo Pakour de un gimnasio tradicional?
-El espacio no tiene nada que ver con el habitual lleno de máquinas, es más parecido a uno de gimnasia deportiva, pero simulando la ciudad y el campo, con uno de los fosos de gomaespuma más grandes de España, de 100 metros cuadrados y 13.000 litros de capacidad, un tatami de 120 metros cuadrados y un circuito con todo tipo de estructuras y elementos para el entrenamiento integral del parkour, como muros, cubos o barras. En total, la nave donde nos encontramos, en el Polígono Store de Sevilla, cuenta con 1.200 metros cuadrados.
-¿Qué valor añadido aporta en relación a los de toda la vida?
-El potencial que tiene esto es el componente social porque, aparte de hacer deporte y conseguir unas condiciones físicas muy buenas, existe un movimiento muy sano de gente joven en torno al parkour, muy socializador, donde interactúan personas de todas las edades.
-¿Qué personas se interesan por esta manera de hacer deporte?
-Lo puede realizar cualquiera, no es para competir, sino para autosuperarse. Se adapta así a tus condiciones físicas. En cualquier caso, la realidad es que el 90% de los que lo practican son adolescentes y jóvenes, de entre 12 y 24 años, aunque también acude gente más mayor. La gente está cansada de gimnasios tradicionales, busca emociones nuevas y por eso les llama la atención el centro. Sobre todo practican el parkour chicos, aunque cada vez hay más chicas.
-Lleva sólo tres meses de andadura. ¿Cuál ha sido el mecanismo para dar a conocer el negocio?
-La comunicación on line, la web (www.universoparkour.com), las redes sociales y el boca a boca han funcionado muy bien. Utilizamos el lenguaje aiudiovisual, mucho vídeo e imagen, porque es un lenguaje más cercano a los jóvenes, quienes, desgraciadamente, cada vez se paran menos a leer. Hemos hecho publicidad en centros educativos, deportivos, en los autobuses y también nos hemos dado a conocer a través de los medios de comunicación.
-¿La crisis se ha notado a la hora de la captación de clientes?
-Tenemos unos 150 socios, aunque hay más gente que viene en días sueltos. Nuestros precios son anticrisis, el socio paga 30 euros al mes. Y la gente viene todo el día, pasa muchas horas aquí, así que es muy asequible.
-¿Ha pensado en extender el negocio de alguna manera?
-Aparte del gimnasio, hay otra línea de trabajo que está relacionada con los eventos y espectáculos en espacios como discotecas y otras empresas, porque la actividad en sí misma es muy llamativa. Con Mercedes Benz hemos llevado a cabo una campaña comercial y nos ha contratado para ir por toda España. También tenemos una tienda on line de ropa deportiva destinada al parkour, la primera existente de este tipo, con diseños cómodos para practicar este deporte.
