Desde que se puso en marcha la zona azul en Sevilla, en 1999, en el barrio del Arenal, la gestión ha estado en manos del Ayuntamiento a través de la firma Aussa, participada en un 51% por Tussam. Pero estas concesiones empezaron a caducar en 2009 y tras una serie de prórrogas, el Consistorio ya trabaja en un nuevo escenario, similar al trazado ya para la grúa: las plazas saldrán a concurso público y por tanto su gestión podrá privatizarse, según confirmaron desde la Delegación de Movilidad. Ahora debe determinarse en cualquier caso si la propia Aussa concurrirá a esta convocatoria y competirá con una oferta para obtener la adjudicación.
En estos momentos existen en la ciudad tres áreas de zona azul, que suman entre ellas unas 4.400 plazas de rotación: el Arenal, con 1.700 estacionamientos, Los Remedios y La Buhaira. Estos tres espacios generaron sólo en 2009 unos ingresos de 2,2 millones de euros, una cifra que además se ha venido incrementando en los últimos años ante el aumento de los índices de rotación de vehículos y que representa casi una tercera parte del presupuesto de Aussa, firma en la que además de Tussam participan empresas del sector privado como el Grupo Azvi y Cajasol. Otra tercera parte de los ingresos proviene de la grúa, también en proceso de privatización, mientras que el resto de los recursos proviene de otros capítulos como la gestión de los aparcamientos de El Arenal, Triana y José Laguillo.
Pero estos datos de la memoria de Aussa no incluyen las ampliaciones de los servicios realizadas durante 2009. Precisamente, un año antes de que la empresa iniciara los trámites para sacar a concurso público sus principales divisiones en Sevilla, emprendió una fase de crecimiento que le llevó a obtener la adjudicación de los servicios de grúa de Coria del Río y Jaén; aparcamientos subterráneos en Torremolinos y Chiclana; y la gestión de la zona azul de Úbeda. En todos estos casos, Aussa concurrió a un concurso público como el que ahora se quiere convocar en el Ayuntamiento de Sevilla y como en él ganó para gestionar un aparcamiento del aeropuerto, al que luego renunció.
La zona azul sigue así los pasos del servicio de la grúa, cuyo concurso público prepara el Ayuntamiento desde antes del verano, e incluso fue aprobado ya en una sesión plenaria en la que IU se desmarcó del proyecto de los socialistas. En este caso, la concesión había sido otorgada a Aussa tras rescatar la adjudicación a Servicleop y después de quedar desierto un concurso público. Se decidió entonces, en enero de 2004, que el servicio de grúa debía prestarse de forma directa por parte del Ayuntamiento, aunque finalmente se encontró una vía para realizar una concesión directa a Aussa, una firma con participación de capital privado. Una sentencia del TSJA de 2007 cuestionó esta fórmula e instó a regularizar el servicio, hecho que no se ha producido hasta este año cuando se ha aprobado sacarlo a concurso público.
En el caso de la zona azul no hay una sentencia en contra, aunque la concesión no se adjudicó por concurso público sino a modo de una gestión directa que finalmente recayó en la sociedad Aussa. Sí pudieron estar afectados por esta sentencia, según fuentes de la empresa consultadas, los aparcamientos que la sociedad gestiona en la Feria.
Los ingresos de Aussa suponen una fuente de recursos para las mermadas arcas de Tussam, aunque los gastos de personal y explotación ascendieron en 2009 a más de 6,5 millones.
