La Guardia Civil abrió el jueves una nueva línea de investigación en el caso de la desaparición de la joven irlandesa de 15 años, Amy Fitzpatrick, que fue vista por última vez en Mijas (Málaga) hace ya 17 días. Los agentes buscan un vehículo de color blanco que le menor solía utilizar pese a no tener carnet.
El propietario del turismo es un amigo de la familia que ha sido detenido por un delito contra la seguridad del tráfico. La idea de que Amy Fitzpatrick se fugó de casa el pasado día de año nuevo empieza a cobrar fuerza entre los investigadores de su desaparición. Ahora intentan localizar el coche que la joven irlandesa solía coger a menudo por si se hubiera marchado con el vehículo. Su dueño, aunque lleva varios días sin saber del coche, no ha denunciado su robo.
A pesar de estas pesquisas, el delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, insistió en que "todas las hipótesis están abiertas en el caso, tanto su desaparición voluntaria como involuntaria". En los mismos términos se pronunció el subdelegado del Gobierno en Málaga, Hilario López Luna.
El propietario del vehículo, vecino de la Cala de Mijas, de unos 30 años y de nacionalidad británica, solía acudir a la casa de la familia Fitzpatrick para arreglarle el ordenador. Sin embargo, su amistad con Amy parece mayor, puesto que le confiaba su turismo sin que ella tuviera todavía el permiso de conducción.
En busca y captura. El hombre, cuya identidad responde a las iniciales R. B. O., fue detenida el pasado miércoles cuando fue a las dependencias de la Guardia Civil a declarar sobre la desaparición de la menor. Según López Luna "estaba en busca y captura por un delito de tráfico que nada tiene que ver con el caso de Amy".
López Garzón añadió que se trata de una persona "próxima" a la adolescente y que declaró ante los agentes del Instituto Armado que "hace varios días echaba de menos un vehículo que utilizaba cuando viene a España y al que Amy tenía acceso fácil, algo que no fue denunciado al principio".
Este hombre fue requerido por la Guardia Civil dentro de la investigación que están llevando a cabo en el entorno de personas más cercano a la menor. La pasada semana se llevaron también el ordenador de la adolescente para ver si podían obtener alguna pista sobre su paradero.
Amy Fitzpatrick fue vista por última vez el pasado día 1 de enero en la urbanización Calypso de Mijas. Sobre las 22.00 horas salió de la casa de su amiga, donde pasó la nochevieja, y fue en dirección a su domicilio, situado a unos dos kilómetros de distancia en la urbanización Riviera del Sol. Se supone que la joven tuvo que transitar por un tramo terrizo y muy poco iluminado que, al parecer, tomaba para cortar camino.
Este sendero ha sido examinado palmo a palmo por los investigadores durante días sin encontrar la más mínima pista que arroje algo de luz al caso.
Pero éste no ha sido el único lugar de búsqueda. Los pasados días 9 y 10 de enero se organizó un operativo especial de batida compuesto por 250 efectivos de varios cuerpos de seguridad y apoyo de la Costa del Sol, que peinaron un radio de seis kilómetros.