En un intento por racionalizar la oferta académica y de paso conseguir mejorar las cifras que evidencian que los alumnos se eternizan en algunas carreras, la Universidad de Sevilla ha fijado en 10 el número máximo de asignaturas que cursar por año.
Es un secreto a voces que existen determinadas carreras en las que los alumnos salen ya metidos en años. La Universidad de Sevilla aprovechará la implantación de los nuevos títulos (grados a partir del curso 2009/2010) para "racionalizar" la oferta.
En la propuesta de guía para el diseño de titulaciones y planes de estudio, que se aprobó en el último Consejo de Gobierno, se fija la fórmula para conseguir este objetivo: "El diseño de cada curso académico en los títulos de Grado debe realizarse de forma que el estudiante no se vea obligado a cursar más de cinco asignaturas o 30 créditos simultáneamente". Si cada curso tendrá 60 créditos, los jóvenes no tendrán más de diez asignaturas anuales en el caso de que la estructura de la carrera sea en cuatrimestres y cinco en el caso de que la carrera no se diseñe en cuatrimestres. Este esquema no impide que un alumno con una pendiente se pueda matricular de más.
Esta noticia supondrá un alivio para alumnos cuyas carreras tienen una oferta tan "atomizada" que cursan a veces hasta 12 asignaturas por año (repartidas en cuatrimestres). "Se trata de mejorar la oferta académica. Esta decisión no significa que vayamos a pasar la mano. Al contrario, con el rigor que caracteriza a la Universidad organizaremos de una manera más racional las carreras de la Hispalense".
Quien así se expresa es el vicerrector de Ordenación Académica Juan José Iglesias, que defiende que la reforma de las titulaciones que se está abordando en estos momentos para adaptar la Universidad española al modelo europeo de educación superior no sólo es "necesaria" sino también "esperada".
En las citadas guías docentes que la Hispalense ha remitido a los centros, se establece que un crédito equivale a 25 horas de estudio. La horquilla posible oscila entre las 25 y las 30 horas. De estas horas, en el caso de los grados, el máximo dedicado a docencia presencial (las clases de toda la vida) será de 10. El mínimo de 7. En el caso de los máster, la docencia presencial irá desde un mínimo de 4 a un máximo de 10. Para obtener el grado, los alumnos tendrán que cursar 240 créditos (cuatro años) en la mayoría de los casos. Sólo habrá excepciones con carreras como Medicina (6 años) y Arquitectura (5 años), entre otras.
