La bajada que los precios de los alimentos experimentaron en el último año y, en menor medida, el mantenimiento de los precios de los carburantes hicieron que la inflación armonizada española se moderase en febrero y se situase en el 0,9%.
Ésa es la tasa del indicador avanzado del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA), que mide la evolución de la inflación con la misma metodología para todos los países de la Zona Euro, con lo que los precios se han moderado dos décimas respecto a enero.
Además, el diferencial de precios con la media de los países de la moneda única vuelve a ser negativo, y los españoles están una décima por debajo de la inflación de la Eurozona que, según el avance dado ayer por Eurostat, fue del 1%.
Para el Ejecutivo, este dato indica que España está en la "senda de la moderación de precios" que "debería ser favorable para nuestra competitividad", según señaló la vicepresidenta económica Elena Salgado a TVE.
Hasta que se conozcan los datos definitivos del IPC, el próximo 12 de marzo, este resultado se explica principalmente, según el INE, por el mantenimiento de los precios de los carburantes frente al aumento de los mismos en 2009 y por una bajada más acentuada de los precios de los alimentos. Así, hace un año, el barril del Brent costaba 43,87 dólares de media frente a los 74,68 dólares actuales.
En opinión del director del Servicio de Estudios del Instituto de Estudios Económicos (IEE), Gregorio Izquierdo, la evolución del petróleo ha tenido un mayor peso que la de los alimentos, y a lo largo del año la mayor influencia la seguirán teniendo los carburantes.
Izquierdo calcula así que el IPC cerrará diciembre en torno al 1,5%, mientras que la media prevista para 2010 es del 1,2%.
Funcas prevé estabilidad de precios hasta julio y, con la subida del IVA, que aumenten hasta el 1,5%.