Hay más ciudadanos comunitarios viviendo en situación irregular en España que extranjeros ilegales de terceros países, según un estudio difundido por el Real Instituto Elcano, que revela el escaso interés de los vecinos de la Unión Europea por cumplir la legislación e inscribirse en el Registro de Extranjeros.
El trabajo señala que es "casi imposible" conocer el número de ciudadanos ingleses, franceses o alemanes afincados en el país, ya que "gran parte de esos extranjeros mantienen a la vez residencia en sus países de origen". En términos legales es residente quien permanece más de tres meses al año en el mismo país.
Así, tras recopilar los datos de las distintas embajadas, concluye que "más de la mitad de sus nacionales que residen en España no se empadrona". Por tanto, "si se considera irregular su estancia cuando no están registrados, el porcentaje de irregularidad entre ellos es mayor que entre los no comunitarios".
El motivo, explica el estudio, es que la norma "es ignorada por muchos ayuntamientos", así como por los extranjeros, que bien por desconocimiento, bien "para seguir recibiendo ciertas prestaciones en su país de origen que perderían si éste detectara que no residen en él", deciden no inscribirse en los registros.
A fecha 1 de enero de 2008 figuraban empadronados en España 924.101 extranjeros procedentes de la UE, de los que 700.557 tenían tarjeta de residencia, lo que implica un 24% de irregularidad, cifra que crecería al incluir a los no empadronados.
