La línea 2 de Metro (Torretriana-Torreblanca) tendrá "inicialmente" siete paradas en el distrito Este. Pero la Junta "no cierra la puerta" a ninguna modificación siempre y cuando "sea viable". Éste fue uno de los mensajes que la consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar, traía bien ensayado para la reunión que mantuvo con la junta de distrito de Sevilla Este, cuyos prolegómenos hacían presagiar un conflicto que la cintura política de Aguilar (alcaldesa de Córdoba desde 1999 a 2008) desinfló con maestría.
Un reducido grupo de vecinos, encabezados por José Baena, portavoz de la plataforma CAIS, se apostó a la entrada de la sede del distrito con la intención de asistir. Personal del distrito, seguridad privada y Policía Local impidieron su entrada alegando que no formaban parte de dicha junta. El delegado del distrito y concejal socialista, Joaquín Díaz, explicó que a la junta asistieron los representantes políticos que marcan las reglas y diez de las 79 asociaciones de vecinos que hay en el distrito y que se escogieron de forma que representaran "a todo el territorio".
Pero, pese a las justificaciones y requerimientos de calma, los vecinos que exigían poder participar en la reunión esperaron a la consejera. Recibida con frases -y flashes- tales como "me está usted defraudando", Rosa Aguilar desmontó cualquier conato de motín. "Vamos a achucharnos para participar todos". Así de simple. Conflicto resuelto.
Y como el arranque amenazaba con acusar a la Junta de falta de diálogo, la consejera prometió la "mejor disposición" para que "todo aquello que sea solucionable, se solucione".
A buen seguro (porque la reunión fue cerrada a los medios de comunicación), los vecinos de la zona de Alcosa le trasladaron la necesidad de que el Metro llegue hasta este barrio. Sobre este particular, la titular de Obras Públicas adelantó minutos antes de comenzar la reunión: "El Metro abarca un radio de Alcosa. Otra zona es cierto que se queda a más de los 500 metros que debe haber entre una estación y otra. Vamos a ver, aunque no atenderemos propuestas inviables", en relación a que el trazado y las estaciones se diseñarán en función de tres parámetros claros: tiempo, seguridad y movilidad de los usuarios. "El modelo de Metro está cerrado en relación con que éste va en subterráneo casi en su totalidad. Sólo en este sentido digo que el modelo está definido. Todo lo demás será dialogado. Veremos las alegaciones una a una", apostilló la consejera.
Una vez más, la Junta dejó claro que las paradas del Metro en el Centro serán dos y estarán ubicadas en la Plaza del Duque y en la de Cristo de Burgos, donde se será "tremendamente respetuoso" con el patrimonio (la plaza y los árboles centenarios, fundamentalmente). Por el Centro, la Junta ha evitado la zona monumental (Catedral, Alcázar y Archivo de Indias) y se ha decantado por dar servicio a la Ronda Histórica, en contra de la propuesta del Partido Popular.
¿Metro a camas? "No podemos solapar infraestructuras. Donde hay cercanías no vamos a llevar Metro". La consejera de Obras Públicas replicaba así a los alcaldes del PSOE del norte del Aljarafe (con el de Camas a la cabeza) que han reclamado a la Junta que el Metro llegue hasta este pueblo. Esta petición le puede estallar en las manos al Gobierno andaluz de cara a las elecciones municipales del próximo mes de mayo. Por eso, Rosa Aguilar se mostró diplomática en este pantanoso asunto: "Podemos hablar de Camas sin ningún problema para ver cuál es el mejor sistema para los vecinos, si la plataforma tranviaria, el cercanías o el Metro".
