Economía

La Junta pide que se concreten las ayudas por el veto de Rusia

Considera que los 165 millones son pocos para el daño que sufrirá el campo. El Ministerio estima que hay que aguardar a los precios en el mercado para pedir más dinero.

el 20 ago 2014 / 11:06 h.

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Un agricultor recoge calabacines en un invernadero de Los Palacios y Villafranca. / GREGORIO BARRERA Un agricultor recoge calabacines en un invernadero de Los Palacios y Villafranca. / GREGORIO BARRERA La Consejería andaluza de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural valoró ayer las medidas anunciadas por la Comisión Europea (CE) para compensar los perjuicios del veto ruso a productos comunitarios, de Estados Unidos, Canadá y Noruega, aunque lamentó «que no se hayan concretado estas medidas». En una nota, el departamento de Elena Víboras destacó que la falta de la puesta en práctica de las iniciativas «impide» las compensaciones y se «obstaculiza en la práctica la eficacia del efecto retroactivo que la CE ha anunciado que tendrían estas medidas». Subrayó, asimismo, que se está trabajando para que se «incluyan también los cítricos, la berenjena, el calabacín y la patata, sin olvidar a la ganadería» porque, para la Junta de Andalucía, «es totalmente necesario que ninguno de los sectores afectados, de forma directa o indirecta, por el veto ruso quede al margen de las medidas que se puedan adoptar». La Consejería de Agricultura también ha valorado la «disparidad» de cifras que suponen el veto ruso, calculado por la CE en más de 5.000 millones de euros, aunque el dinero que se va a destinar sea de 165 millones, por lo que no se puede «dar por cerrado este problema con la cantidad avanzada, sino que debe prever la posibilidad de ampliarla». Este departamento, agregó, está «ultimando los dispositivos materiales para poder aplicar las medidas avanzadas por Bruselas, tan pronto como se publiquen los oportunos reglamentos comunitarios». Por su parte, la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, aseguró que se emplearán «todos los recursos necesarios» para paliar los efectos del veto ruso sobre los productos hortofrutícolas andaluces y pidió «tranquilidad» a los agricultores, porque «el Gobierno va a estar vigilante para impedir que ningún sector se vea afectado por el veto ruso a las exportaciones europeas». En un comunicado, Crespo recordó que ya se ha anunciado una dotación de 165 millones para la retirada de frutas y hortalizas perecederas y que, junto a ello, Bruselas ha decidido aprobar un reglamento especial para la financiación de la retirada de melocotones y nectarinas de manera retroactiva» a fecha 11 de agosto, tal y como había pedido España incluso antes del veto ruso. Crespo recordó que Bruselas se están «ultimando los detalles de aplicación de estas medidas» y, en este sentido, pidió «tranquilidad» a los productores, pues la Comisión Europea «va a poner en marcha todas las medidas que hagan falta. Y si es necesario dedicar más recursos económicos, «el Gobierno de España no dudará en pedirlos para paliar los efectos de la decisión rusa». La delegada del Gobierno recordó que, además, se ha acordado con el sector de la distribución llevar a cabo campañas de promoción de los productos hortofrutícolas, con el objetivo de recuperar el consumo nacional, fundamentalmente de la fruta de temporada, al tiempo que se hará un seguimiento «semanal» de los datos de consumo, precios y volúmenes para conocer la evolución de las diferentes medidas. «Vamos a ver la evolución de los mercados; en función de eso, podremos valorar si es necesario incrementar esa ficha presupuestaria o si afortunadamente el mercado europeo y los mercados alternativos han sido capaces de absorber la producción que iba a Rusia y los mercados se comportan mejor de lo esperado. Pero es obligado hacer ese seguimiento y responder en consecuencia», dijo ayer la ministra del ramo, Isabel García Tejerina a Efeagro. En cuanto al resto de los sectores afectados por el veto ruso, la ministra ha avanzado que la semana que viene el secretario general de Agricultura, Carlos Cabanas, se volverá a reunir con el sector de frutas y hortalizas, «pero también con el de los productos cárnicos y el lácteo».

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