A pesar de los vaivenes del PP sobre la reforma de la financiación autonómica -un día propone reformar el modelo en esta legislatura y al siguiente entierra esa posibilidad-, la Junta insiste en sus tesis y llevará esta reivindicación a la Conferencia de Presidentes de la semana próxima. El Gobierno andaluz volvió a alzar ayer la voz contra un sistema que, según denunció, agranda las desigualdades.
La escasez de recursos ha vaciado los fondos creados para compensar a las regiones con menos renta. Andalucía ha perdido en los dos primeros años 1.973 millones, concretó la consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, en el Parlamento. Pidió expresamente al PP que aclare si, como en Valencia, apoyará esta demanda, pero los populares eludieron hacerlo. Eso sí, atizaron al Gobierno de coalición por su "derroche y corrupción".
La consejera de Hacienda fue clara: "No renegamos del modelo, pero se está aplicando mal". El actual sistema de financiación fue aprobado en 2009 con el aval del presidente José Antonio Griñán y con un Gobierno socialista. Ahora el Ejecutivo del PP, a pesar de la disposición que mostró la vicepresidenta, Sáenz de Santamaría, tras el órdago de Cataluña, no va a abrir el melón de la financiación porque no hay dinero para hacerlo y "no es el momento". El PP llevaba esta reforma en su programa electoral. Su estrategia es revisarlo cuando corresponde según la ley, en 2013, pero como los datos de ese ejercicio no estarán hasta 2015, el problema se aplaza.
Aguayo denunció que el modelo sitúa a Andalucía, junto a otras cinco comunidades, por debajo de la media en financiación por habitante, con la diferencia de que Andalucía es la única de ese grupo que no ha recibido dinero del Fondo de Competitividad, ideado para que las que más aportan no pierdan sus posiciones. Criticó además que las comunidades no participen de la recaudación de impuestos que el Estado ha subido, como el IVA o el IRPF.
IU reclamó que el modelo tenga en cuenta no solo la población, sino también la falta de vivienda o el paro. El PP dedicó muy poco a hablar de financiación. Carlos Rojas reprochó a la Junta que "ahora reniegue de un sistema que es una criatura socialista" y abundó en su estrategia de poner en duda las cuentas andaluzas. "Denos los datos del derroche, de la mala gestión. Esos datos están en la cárcel", espetó Rojas, que sacó a relucir el fraude de los ERE. Arremetió contra el Gobierno andaluz por pedir un "rescate con mayúsculas de 4.906 millones" . La consejera le echó en cara que ataque con el rescate cuando otras comunidades del PP lo han solicitado y cuando el propio Gobierno actúa con lealtad hacia Andalucía.
La situación financiera que en el futuro inmediato vivirá Andalucía se despejará en parte hoy con los Presupuestos del Estado. Ahí, el Gobierno de Griñán y el PSOE-A testarán las relaciones con el Ejecutivo del PP. Los socialistas advirtieron ayer de que mantendrán una "exigencia responsable" y auguraron un cambio de rumbo. La consejería de Economía mandó una carta al Ministerio de Hacienda para recordarle que las inversiones del Estado deben de cumplir con el Estatuto y dedicar a la región el 17,8% del total.
Sobre el rescate, PSOE e IU confían en que no haya condiciones políticas. "Buscamos liquidez no que se liquiden la autonomías", advirtió José Antonio Castro (IU). El vicepresidente de la Junta, Diego Valderas, señaló que el dinero del Fondo de Liquidez se destinará a pagar las deudas pendientes con municipios, farmacia y dependencia. El PP reclamó transparencia y que se diga dónde irá el dinero.
