El presidente de Andalucía, José Antonio Griñán, ha asegurado hoy que si se lleva a cabo la fusión de Caja Jaén, Unicaja y CajaSur, la Ley andaluza de Cajas tendrá que reformarse por la singularidad de esa última entidad, donde la Iglesia tiene el 30 por ciento de sus órganos directivos.
Griñán ha hecho estas manifestaciones en un desayuno informativo de Europa Press, donde no ha querido pronunciarse sobre esa fusión hasta que la consejera de Economía, Carmen Martínez Aguayo, "lleve el informe a la mesa del Consejo de Gobierno" y donde ha dicho que la reforma de la ley se hará "cuando nos digan que hay acuerdo".
Hasta ese momento, Griñán es partidario de mantener una "absoluta discreción" en este asunto, ya que la decisión la deberán tomar las propias cajas.
Griñán ha vuelto a mostrarse partidario de un sistema financiero propiamente andaluz para afrontar los grandes desafíos del futuro más inmediato, para lo que ya se han dado pasos importantes como la la fusión de las cajas del Monte y San Fernando, la vuelta a la tutela de la Junta de CajaSur y la creación del Banco Europeo de Finanzas.
Las negociaciones para la fusión de las tres cajas no contradicen, a su juicio, esa línea política del Gobierno de la Junta, "sino que van en esa dirección".
"Cómo se haga (la fusión) dependerá de los consejos de administración y ahí no vamos a entrar", ha apostillado.
El proyecto de creación de una gran caja andaluza no contrasta según Griñán, con posibles fusiones interterritoriales, aunque el jefe del ejecutivo autonómico no ha querido pronunciarse sobre la posibilidad de que la unión de cajas "crezca por Extremadura".
Preguntado por si estaría de acuerdo con la supresión del veto autonómico a las fusiones, Griñán ha afirmado que es partidario de ejercer la autorización que confiere el Estatuto de Autonomía y de hacerlo con criterios estrictamente económicos y financieros.
