La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, aseguró ayer que la actuación que tendrán que adoptar los profesionales sanitarios ante las menores que aborten sin consentimiento paterno se desarrollará a través de un reglamento. Según la nueva Ley del Aborto, que entrará en vigor en julio, los padres deberán ser informados de que sus hijas de entre 16 y 17 años van a interrumpir su embarazo, salvo en el caso de que éstas aleguen peligro de violencia intrafamiliar. La Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción Voluntaria del Embarazo (ACAI) pidió a Sanidad que especifique cómo aplicar la ley. "Estamos trabajando en ello", señaló la titular de Sanidad, quien adelantó que esta cuestión forma parte del desarrollo reglamentario de la propia ley.
