Un fuerte temporal ha azotado el sur de Brasil entre la tarde del viernes y hoy obligando a al menos 8.400 personas a abandonar sus hogares y causando numerosos daños materiales, informaron fuentes oficiales.
En el estado de Paraná, el más afectado por las lluvias, cerca de 6.000 vecinos tuvieron que salir de sus viviendas inundadas y están alojadas en albergues públicos o en casas de parientes, según datos del organismo de Defensa Civil regional.
En la zona más castigada, que incluye 24 municipios, 3.136 casas han sido destruidas total o parcialmente por las inundaciones, deslizamientos de tierra y los vientos huracanados, según el último balance.
Por el momento, las autoridades no han registrado fallecidos, aunque varias personas han tenido que ser atendidas en hospitales locales con heridas de diversa gravedad.
En la localidad de Pato Branco, cercana a la frontera argentina, se registraron 205 milímetros de lluvia en las últimas 24 horas, un volumen que casi duplica la media de precipitaciones esperada para todo el mes.
En el estado de Santa Catarina, 2.406 personas se vieron obligadas a abandonar sus domicilios, mientras que cinco municipios decretaron el estado de emergencia, según informó el ente de Defensa Civil estatal en un comunicado.
