La profesora de religión de Zújar (Granada) que tuvo que retirar una cruz y un icono oriental de la Virgen María del Departamento de Ciencias Sociales y Religión que comparte con otros docentes del centro lamentó ayer públicamente la postura "contradictoria" de la Delegación Provincial de Educación respecto a este asunto.
En un comunicado publicado en la web de la Asociación Profesional de Profesores de Religión en Centros Estatales, recogido por Europa Press, la docente ha decidido romper el silencio que mantenía estos últimos días para "aclarar" que ella no ha originado "conflicto alguno", ya que retiró los símbolos religiosos "a los pocos minutos" de que así se lo pidieran sus compañeros "ante el silencio del director del centro, que estaba presente como miembro del departamento". "Tenga yo derecho o no a que esos símbolos estén ahí, pues desde el punto de vista legal no hay nada legislado en España respecto de estos espacios, no pretendía causar daño ni atentar contra otras creencias, puesto que soy la profesora de religión católica en este instituto y forman parte de mi materia", relata la docente.
Tras agradecer las muestras de apoyo recibidas de padres y alumnos en estos días "tan difíciles", la profesora no ocultó su postura contraria a la actitud mantenida en este asunto por la Delegación de Educación de la Junta en Granada. Acusó al Gobierno de emitir mensajes "contradictorios" acerca de si debe ser el Consejo Escolar el que decida sobre la retirada de los símbolos religiosos, cosa que finalmente no ha hecho este organismo por carecer de competencias para ello. A juicio de la docente, "la historia" no ha sido "sólo defender unos símbolos o una religión, sino defender también el trato que como persona contratada por la Junta he de reclamar".
