Recién llegado al cargo le ha tocado organizar un traslado de la Virgen y el primer Año Jubilar Mariano. ¿Cómo lo está viviendo? Lo he vivido con muchísimo trabajo. Un año efectivamente de mucha intensidad porque han coincidido grandes acontecimientos en la historia del Rocío. El traslado de la Virgen, pero también el bicentenario del Rocío Chico, que estamos celebrando, con ello solicitamos un Año Jubilar, que concedió la Santa Sede, algo excepcional en la historia del Rocío. Y lo hemos afrontado con un gran esfuerzo por parte de la hermandad, pero sobre todo con muchísima satisfacción, con muchísima ilusión y con un sentimiento grande de gratitud por el privilegio de haber conocido en mi mandato como presidente estos acontecimientos. El presidente de la hermandad Matriz de Almonte, Juan Ignacio Reales, ante la Virgen del Rocío vestida de Pastora en la parroquia de Almonte. ¿Se plantea la hermandad pedir que se establezca la celebración de un Año Jubilar de forma periódica, quizás coincidiendo con los traslados? Sí, nos lo plantemos. El próximo traslado de la Virgen, en 2019, coincidirá con otra efeméride importante: el centenario de la coronación. Esta coincidencia será motivo para volver a pedir el Año Jubilar y probablemente sea entonces, si eso va bien y se concede por segunda vez en un segundo traslado, cuando se solicite un jubileo perpetuo con motivo de los traslado de la Virgen. Sería nuestro deseo y vamos a poner nuestro esfuerzo para que pueda conseguirse. Pero seremos respetuosos con lo que diga la Iglesia. Ahora mismo nada más que tenemos palabras de gratitud por este Año Jubilar. Entiendo entonces que están satisfechos con los frutos de este Año Jubilar y de esta estancia de la Virgen en Almonte. El Año Jubilar ha sido muy positivo y beneficioso para El Rocío en cuanto que ha supuesto un respaldo muy importante para esta manifestación de devoción popular por parte de la más alta autoridad de la Iglesia. Por tanto, el Papa ha refrendado todo lo que significa el movimiento rociero como una realidad de Iglesia y viene a ser algo parecido a lo que supuso en 1993, la visita de Juan Pablo II, ya beato. Por otro lado, el Año Jubilar ha supuesto expandir El Rocío más allá de sus fronteras naturales, pues han venido personas, grupos de todo tipo, que no pertenecen estrictamente al mundo rociero: colegios, parroquias, otras instituciones, hermandades de penitencia, hermandades de gloria, que, teniendo sus propias advocaciones, ven en la Virgen del Rocío una Madre común de todos. Así, la imagen de la Virgen se convierte en una de las imágenes universales, en la que todos vemos a nuestra Madre por encima de las devociones particulares. ¿Han notado la diferencia entre la estancia de la Virgen este año en el pueblo y las anteriores? No tenemos todavía los datos cerrados. Pero en la Venida de la Virgen participaron, según los datos oficiales, 1,3 millones de personas. En la procesión del domingo por Almonte, 600.000 personas... Así que no sería descabellado decir que en estos nueve meses han pasado por Almonte entre dos y tres millones de personas. Y sin olvidar que quedan tres meses de Año Jubilar en El Rocío, donde vivirá su máximo esplendor porque la Virgen está en su ámbito natural, coincidirá con la procesión extraordinaria con motivo del bicentenario del Rocío Chico. Aunque el dato numérico no nos ha preocupado nunca, lo que queríamos es que la devoción fuera más allá, convertirla en una devoción universal. ¿El broche de oro de este Año Jubilar será la declaración de la ermita como santuario internacional? Son dos cosas distinta. El Año Jubilar tendrá el momento más importante durante esta romería jubilar y, sobre todo, en el Rocío Chico, por el que ha sido concedido, y especialmente en la procesión del 19 de agosto, aunque la clausura oficial será el 8 de septiembre, con el obispo de Huelva y el nuncio de España. Independientemente, el expediente del santuario internacional espera su tramitación. Por nuestra parte está terminado, pero ya sabemos que las cosas en Roma son lentas. ¿Veremos al Papa Francisco en El Rocío? No lo sé. Nos encantaría. Estamos preparando una peregrinación a Roma en acción de gracias por este Año Jubilar que tendrá lugar el próximo mes de febrero. Aprovecharemos la ocasión para invitarle. De cara a esta romería. ¿Cómo se desarrollarán las presentaciones desdobladas? Ya está todo organizado, los horarios establecidos desde hace un año. Esperemos que todo se desarrolle con normalidad y que todos disfrutemos de este momento tan importante que marca el comienzo de la romería. Pero insisto en que no es la primera vez, el Rocío se ha adaptado siempre al crecimiento de la devoción. Hasta los años 60 las presentaciones eran el sábado por la tarde y, ante el crecimiento del número de hermandades, hubo que adelantarlas a la mañana. Pero debe ser un crecimiento controlado, que no haga perder la esencia, y nosotros haremos siempre lo necesario para adaptarnos. No ha sido solo adelantar. Han tenido que cambiar horarios, modificar caminos... ¿Han contado siempre con la disponibilidad de estas hermandades? Siempre. Además nosotros optamos también por la fórmula que supusiera el menor trastorno posible para la mayoría de las hermandades. Por eso las 30 más recientes, pues la mayoría estaban en El Rocío desde un día antes. Solo tres hermandades han tenido que modificar sus caminos. Siempre con la ayuda de las demás para cederles el paso. Nada traumático. Todos los rocieros lo esperaban. ¿Cómo han recibido las hermandades más antiguas esta nueva organización? Ahora las primeras no lo serán a la hora de la presentación. Lo han asumido muy bien. Entienden que esto favorece a todo el movimiento rociero. Además, lo contrario, haber adelantado las primeras al viernes, habría sido un caos para todos, un grave perjuicio para todas las hermandades, que hubieran tenido que modificar sus caminos. Esto sí hubiera dolido. Habría sido un despropósito. Este adelanto da más margen para que puedan incorporarse nuevas hermandades. ¿Dónde está el límite? No hay límites. Nosotros nos preocupamos de que el crecimiento no sea solo numérico, sino que sea auténtico, que no se pierda un ápice en la autenticidad a la devoción a la Virgen del Rocío, que lo externo vaya acompañado de lo interno, lo que significa la Virgen en la vida de todas las personas. En las últimas romerías hemos visto que, por la crisis, ha mermado el número de peregrinos en los caminos, pero, cuando sale la Virgen, la aldea está llena. El año pasado el número de persona, en el cómputo total, respecto a años anteriores, incluso subió. La crisis afecta, pero solo en que cambia nuestra forma de venir al Rocío. Hay caminos que se han acortado, estancias que se limitan al fin de semana, mucha gente que va y viene... Cambian los hábitos, pero los rocieros no dejan de estar con la Virgen, ni en la romería ni el resto del año. ¿Este año las camisas serán blancas o verdes? Eso es algo espontáneo del pueblo de Almonte en lo que la hermandad no entra. ¿Mantienen el deseo de que se recuperen los horarios antiguos? Nosotros lo que esperamos siempre es que la procesión salga bien, que no haya problemas, que la Virgen visite a todas sus hermandades y entendemos que con 112 es difícil recuperar horarios de cuando había 50 o 60 hermandades. ¿Qué le parece que haya foros que hayan promovido la proclamación de la Virgen del Rocío como Patrona de Andalucía? No me consta oficialmente. Nadie ha consultado al pueblo de Almonte ni a su representante en este tema, la hermandad Matriz. Nosotros no entramos en esto, porque a la devoción de la Virgen no hay que ponerle límites ni fronteras y como Patrona, es Patrona de Almonte. Queremos ser respetuosos y no nos gustaría que nadie entendiera que esto crea agravios ni comparaciones con otras devociones muy importantes que hay también en Andalucía.