La Navidad tiene un impacto negativo para el planeta según un 46,2% de los vecinos de la Gran Sevilla, aunque son más los que piensan que las ferias y romerías son perjudiciales para el entorno. Esta creencia se debe, en parte, a que sólo un 20% conoce los programas medioambientales que se aplican en estas fechas.
El Ecobarómetro 2007, elaborado por la fundación Forja XXI en colaboración con la Consejería de Medio Ambiente con encuestas en la capital hispalense y 21 municipios de la primera corona, planteó a los ciudadanos su visión sobre el impacto que una serie de acontecimientos tienen, a su juicio, en el medio ambiente.
Las peor paradas fueron las ferias, con un 66,5% de los encuestados que las consideran perjudiciales para el entorno, seguidas de las romerías (54,1%). En el otro extremo se sitúan la Semana Santa y las fiestas patronales que no contaminan nada según la opinión del 24,5% y el 23,2%, respectivamente.
Tampoco sale bien parada la Navidad: estos días en que se discute sobre la oportunidad o no de reducir la iluminación navideña para contribuir en la lucha contra el cambio climático, o en el uso de sistemas de bajo consumo para estos adornos, ocupa el tercer puesto en las celebraciones menos ecológicas según la opinión de los encuestados.
La opinión sobre cuáles son las fiestas que más repercusión tienen en el entorno es bastante homogénea entre los vecinos de la capital hispalense y los que residen en la periferia. Tan sólo se aprecia un ligero despunte en la opinión sobre el impacto de la Semana Santa, que es muy contaminante para el 25,5% de los vecinos de la primera corona. Esta cifra asciende hasta el 33,5% en la capital hispalense. La diferencia puede radicar en la gran trascendencia que esta fiesta tiene en Sevilla. También hay consenso entre hombres y mujeres y en todos los grupos de edad.
Pese a que el Ecobarómetro 2007 no recoge los motivos que alegan los encuestados para formular sus opiniones respecto a la repercusión en el medio ambiente de los principales eventos de sus municipios, sí aporta datos sobre su conocimiento sobre los programas que las distintas instituciones ponen en marcha durante estas fechas para paliar este impacto. De esta manera, se extrae que sólo un 20% de los consultados afirma estar al tanto de estas iniciativas.
De hecho, en general, las personas que conocen los planes de prevención de impacto de las fiestas sólo están al tanto de acciones relacionadas con la limpieza y la gestión de residuos sólidos urbanos. Pero tampoco es muy frecuente. Sólo algunos afirman conocer las acciones desarrolladas durante la romería de El Rocío -como el Plan Romero- y otras encaminadas al reciclaje de desechos a través, por ejemplo, de puntos limpios.
Sí sorprende el amplio abanico de políticas medioambientales al margen de las fiestas mencionadas por los encuestados que van desde planes para el ahorro de energía, programas contra incendios forestales, medidas de seguridad ciudadana, movilidad y acciones contra la contaminación acústica, entre otras.
Una vez más, los resultados de este estudio ponen de manifiesto que los hombres muestran un conocimiento algo mayor sobre el tema que las mujeres. En este caso, las políticas desarrolladas para la reducción del impacto de estos acontecimientos están más cerca de ellos (22,9%) que de ellas (18,9%). Del mismo modo, son las personas de entre 30 y 64 años las que más informadas están sobre estas cuestiones.
El Ecobarómetro 2007 recoge las opiniones de vecinos de Sevilla y de los municipios de Alcalá de Guadaíra, Almensilla, Bormujos, Camas, Castilleja de Guzmán, Castilleja de la Cuesta, Coria del Río, Dos Hermanas, Espartinas, Gelves, Gines, Isla Mayor, La Puebla del Río, La Rinconada, Mairena del Aljarafe, Palomares del Río, Salteras, San Juan de Aznalfarache, Santiponce, Tomares y Valencina de la Concepción, todos en la primera corona del área metropolitana. Para ello, fueron entrevistados 512 residentes en la capital hispalense y 288 vecinos de los municipios de la periferia.
