Local

La mujer del pederasta fue la clave en la investigación del caso Mari Luz

Isabel García, mujer de Santiago del Valle, presunto asesino de Mari Luz Cortés, ha sido la pieza clave en las investigaciones sobre la desaparición y muerte de la niña. El juzgado de Instrucción 1 ha levantado parcialmente el secreto del sumario, desde el día de la desaparición hasta que el cadáver fue hallado en las aguas del río Tinto. (Foto: El Correo).

el 15 sep 2009 / 03:02 h.

TAGS:

Lorena Correa

Isabel García, mujer de Santiago del Valle, presunto asesino de Mari Luz Cortés, ha sido la pieza clave en las investigaciones sobre la desaparición y muerte de la niña. El juzgado de Instrucción 1 ha levantado parcialmente el secreto del sumario, desde el día de la desaparición hasta que el cadáver fue hallado en las aguas del río Tinto.

De esta parte del sumario se extrae, a priori, que la mujer de Santiago, Isabel García, ha sido una pieza fundamental en la investigación del caso, desde que el matrimonio prestó declaración por primera vez. Eso fue en Granada, días después de que la niña desapareciera. Santiago del Valle dijo en el interrogatorio que no tenía nada que ver con el caso; que se había marchado del barrio por miedo a la represalias de la familia Cortés y que, además, en las horas de la desaparición de la niña fue andando con su mujer hasta la estación de autobuses de Zafra.

Sin embargo, está versión chocó, en parte, con la que dio Isabel García. La mujer del pederasta reconoció a los agentes que durante unas horas del aquel domingo 13 de enero no estuvo con su marido. Con esta revelación, Isabel García confirmó, sin querer, las sospechas de la Policía: Santiago del Valle mentía.

En ese momento, la investigación, que aún no había cerrado ninguna hipótesis, se centró en vigilar los movimientos del matrimonio, que comenzó a desplazarse por otras provincias españolas. Es más, en los días posteriores a la declaración de Santiago e Isabel en Granada, los agentes comprobaron que la coartada del pederasta era incierta, puesto que analizaron todas las cámaras de seguridad privada instaladas en las calles por las que, supuestamente, el matrimonio había pasado de camino a la estación de autobuses de Damas, en el barrio de Zafra.

Así, el sumario recoge el resto de pesquisas policiales que siguieron en los días posteriores a la desaparición de la niña de cinco años. Los agentes interrogaron a cientos de personas del barrio como posibles testigos; investigaron todas las furgonetas blancas que fueron compradas y vendidas por esa fecha, para avalar o desechar la teoría del secuestro; registró todos los contenedores de basura de El Torrejón y ordenó el análisis de los residuos del vertedero de Villarasa. Así, comprobó cientos de llamadas que alertaban de la presencia de Mari Luz en diferentes partes de España y que, al final, ninguna arrojó pistas sobre el suceso.

Desde ayer, los abogados de la defensa, de los dos detenidos Santiago y Rosa del Valle, así como de la acusación particular, ejercida por la familia de la niña, tienen de plazo un mes para acceder a las diligencias policiales que se practicaron desde el 13 de enero, cuando Mari Luz fue vista por última vez comprado chucherías en un kiosco, hasta que apareció el cadáver, la tarde del siete de marzo.

  • 1