La nueva comisaría de la Policía Nacional de Rabesa, en Alcalá de Guadaíra, funciona ya a pleno rendimiento. Un total de 110 agentes del cuerpo trabajan en este edificio de más de 2.000 metros cuadrados y que costó en torno a tres millones de euros.
Pese a que el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, no pudo inaugurarla ayer como estaba previsto con motivo de la desarticulación del comando Vizcaya de ETA, los agentes culminaron el traslado al nuevo edificio para continuar con sus labores en el lugar.
La comisaría, más moderna y funcional que la anterior, aspira a revitalizar el popular barrio. Este edificio se suma así a otras infraestructuras de reciente creación en el lugar, como el centro de salud, el campo de fútbol y los nuevos parques, entre otros.
Las obras culminaron hace tres meses, pero hasta hace unos días no empezó el traslado. El inmueble está adaptado a las necesidades de la plantilla, compuesta en la actualidad por 110 agentes. El inmueble se distribuye en dos plantas en la calle Rafael Beca, esquina con Maestro José Casado. Es una sección de una parcela mayor, de 8.000 metros cuadrados, ocupada por el citado centro de salud del barrio, recientemente inaugurado.
Distribución. En la distribución del edificio se dedica un sótano para el garaje y los calabozos con una rampa de acceso. También dispone de vestuarios, así como de otras dependencias habituales para el desempeño de las funciones del área de asistencia de los letrados, el espacio para las rondas de reconocimiento y las demás dependencias de la Policía Nacional.
El terreno sobre el que se levanta tiene un desnivel que permite situar la entrada principal en la planta superior. Tras un recibidor en el que se ubica el puesto de control y de atención al ciudadano se disponen las dependencias para la obtención del Documento Nacional de Identidad (DNI), Extranjería y la oficina de denuncias. En el interior se ubica también el centro operativo de telecomunicaciones y el espacio reservado a los archivos. El edificio cuenta, además, con la última tecnología. De este modo, dispone de un área telemática para el teléfono 091 y de un circuito cerrado de televisión. Cuenta también con los últimos sistemas de telefonía, electrónica e informática.
Los policías nacionales de la ciudad abandonan así el edificio que ocupaban de forma provisional junto al parque Centro desde de 2005 cuando se mudaron porque la antigua comisaría corría riesgo de derrumbe.
