Los nuevos autobuses urbanos cumplen mañana el primer año circulando por las calles de Utrera. El 2 de febrero de 2009, los vehículos de Los Amarillos llegaron para sustituir a la tradicional empresita y, pasados 365 días, ya han sido unos 40.000 los usuarios que se han desplazado por la ciudad en alguna de las dos líneas que tiene el servicio.
"Por la experiencia adquirida en localidades parecidas a Utrera, creo que el número de viajeros que han utilizado el autobús en este primer año se acerca bastante a lo estimado en un principio", señaló el gerente de la empresa adjudicataria, Ángel Escrivá, quien reconoció que "no nos hemos llevado ninguna sorpresa, ni a favor ni en contra, en relación a las cifras registradas sobre el volumen de pasajeros".
De todas las paradas con las que cuenta el recorrido, la estación de trenes se ha convertido en el lugar donde se da cita un mayor número de viajeros, al tratarse de uno de los puntos donde confluyen las dos líneas que se encuentran en servicio actualmente. En concreto, destacan como horas punta las comprendidas entre las ocho y las nueve de la mañana, y las que hay de 13.00 a 14.30 horas, siendo en estas dos franjas del día cuando los vehículos presentan un mayor índice de ocupación.
El perfil se viajeros que hace uso del nuevo transporte urbano es "el de personas que se mueven para ir a trabajar, a los lugares de estudio o a los hospitales, sobre todo teniendo al tren de Cercanías como principal punto de conexión con los autobuses", explicó Escrivá.
En palabras del gerente de Los Amarillos, entienden que el "pueblo de Utrera ha acogido de forma positiva la puesta en servicio de estos nuevos autobuses ya que, hasta el momento, no hemos recibido ningún tipo de queja, reclamación ni incidente digno de mención que indique lo contrario".
Este servicio ha supuesto, a su juicio, "una mejora sustancial para el pueblo, en líneas generales, tanto por la ampliación horaria y de calendario, como por la incorporación de vehículos nuevos". Y esa mejora ha venido a paliar un poco la tristeza por la marcha de la empresita, que permaneció décadas prestando servicio.
Hasta el momento, hay en circulando dos autocares -uno por línea-, aunque la empresa ha habilitado un tercer vehículo para solucionar imprevistos como averías o accidentes, algo que ha sido "fundamental para mantener la calidad del servicio".
Sobre las posibles mejoras en el transporte urbano, el alcalde de Utrera, Francisco Jiménez (PA), comentó que "hay que hacer balance en profundidad de cómo funciona para hacer los ajustes necesarios e intentar mejorarlo en la medida de lo posible".
Para superar los primeros momentos de incertidumbre que existían con respecto a este servicio, sobre todo en la frecuencia de paso y horarios, se han instalado a lo largo del año paneles informativos en las paradas más frecuentadas, al tiempo que se ha habilitado un teléfono de información a los usuarios para que puedan resolver sus dudas con respecto a la prestación de este servicio.
Con el primer aniversario de los nuevos autobuses, también llega a su fin la gratuidad de los jubilados y pensionistas, que a partir de ahora podrán hacer uso de un abono mensual al precio de tres euros. El resto de las tarifas se mantienen, con 90 céntimos el viaje, cinco euros el abono de 10 viajes y 9 euros la tarjeta mensual para escolares.
