La peatonalización de la calle Asunción es uno de los principales retos del Gobierno local para este mandato. Tras las primeras conversaciones con los comerciantes y vecinos se ha adoptado una decisión: las obras empezarán después de Feria para reducir el impacto sobre el sector en la zona.
El pasado 4 de agosto, el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, anunció oficialmente su decisión de desempolvar el proyecto de peatonalización de la calle Asunción, esbozado en la época de Alejandro Rojas Marcos (PA). Tras ser incluido en el programa electoral, el regidor lo convirtió este verano en una prioridad. Un reto que el equipo de Gobierno debía afrontar este mandato.
La presentación se precipitó, y se realizó sin un plan de tráfico claro y sin previas conversaciones con los comerciantes. Éstos reprocharon la actuación del equipo de Gobierno y centraron sus críticas en una denuncia: si las obras se inician en el primer trimestre de 2009 -como planteó el alcalde- se registrarían importantes pérdidas en el sector tanto por las mercancías ya contratadas por los establecimientos como por la necesidad de realizar una previsión económica. A esto se añade la importancia que tiene la Feria para la zona y el impacto que podía tener que esta vía estuviese completamente levantada en estas fechas.
Tras las primeras reflexiones, el equipo de Gobierno ha adoptado una decisión: las obras comenzarán, siempre y cuando se lleven a cabo los trámites según lo previsto, después de la Feria de Abril. Primero, se abrirá el terreno para acometer las obras de Emasesa, similares a las ejecutadas en la Avenida de la Constitución, y posteriormente se iniciará la reurbanización de la vía que la dejará con sólo un nivel, con un carril bici y con el acceso de vehículos limitado a aquellos de servicio público, emergencias y los de los garajes de la zona.
Éstos son los plazos que maneja el delegado del distrito Los Remedios, Joaquín Díaz. Según explicó el edil, el anteproyecto se presentará antes de que finalice el mes y será consultado con vecinos y comerciantes durante al menos dos semanas. El objetivo es introducir en el diseño todas las peticiones que se planteen y lograr así el máximo consenso posible en el barrio.
En octubre, le llegará el turno a la empresa municipal Emasesa. Al igual que en el resto de obras de peatonalización que se han llevado a cabo en la ciudad, los trabajos se aprovecharán para sustituir las tuberías, la red eléctrica e instalar un nuevo colector. Todo este proyecto debe estar ultimado en el arranque del próximo año.
El plan del Ayuntamiento, al igual que en otros proyectos que se han llevado a cabo en la ciudad, es que los trabajos de mejora de la red de abastecimiento y las obras de reurbanización se realicen de forma acompasada. Se trata de que una vez que la intervención de Emasesa esté ya en marcha, la siguiente fase esté adjudicada para que se afronte inmediatamente.
El cumplimiento de estos plazos es esencial para el equipo de Gobierno. Las obras tienen una duración estimada de 18 meses. Si comienzan en mayo o junio de 2009 deben finalizar a principios de 2011. Año electoral. Si esto se logra, PSOE e IU volverán a presentarse ante las urnas con un plan de peatonalización y movilidad sostenible bajo el brazo -como ya ocurrió en 2007 con la Avenida de la Constitución-.
El reto del cumplimiento de los plazos cobra si cabe más importancia por las características del barrio y del sector comercial de la zona que ya han abanderado una importante batalla, incluso legal, contra los trabajos del Metro, y que ya amenazan con activar un nuevo frente contra el Gobierno local por este proyecto.
El alcalde en su presentación de los objetivos para este año -realizada la pasada semana- y en su particular campaña de verano ha concedido un sitio especial a este proyecto, que supone la intervención más ambiciosa llevada a cabo por el Ayuntamiento en un barrio que ha denunciado en repetidas ocasiones su abandono. A esto se añade el plan integral para la zona aprobado por el Pleno y reclamado en repetidas ocasiones por el Partido Popular.
