Patricio Cárceles y Francisco Arroyo. J.M. PAISANO (ATESE)
El de 2012 no ha sido un año fácil para nadie, tampoco para la ONCE, que no ha permanecido ajena a las dificultades propias de la coyuntura económica y también derivadas de la entrada de operadores de juego en internet, que se tradujeron en una caída del 2,2% de las ventas de sus cupones y del resto de productos de juego en el conjunto de España, hasta alcanzar los 1.913,4 millones de euros.
Sin embargo, eso no ha impedido que la Organización Nacional de Ciegos Españoles continuase un ejercicio más promoviendo la integración y el empleo no sólo de las personas con deficiencia visual, sino también con otro tipo de discapacidad. En Sevilla, la organización creó el año pasado 196 nuevos puestos de trabajo, con lo que ya roza los 7.000 trabajadores en la provincia (6.946). La mitad de estos nuevos empleos se generaron directamente en la ONCE, mientras que el 40% en empresas vinculadas (limpieza, vigilancia, hostelería, lavandería, entre otras) y en la Fundación. El 10% restante se promovió gracias a proyectos de colaboración y centros de formación ocupacional.
Así lo explicó ayer el delegado territorial de la organización en Andalucía, Patricio Cárceles, que presentó junto al director de la ONCE en Sevilla, Francisco Arroyo, los datos de la memoria de actividades correspondiente a 2012.
Cárceles destacó el esfuerzo realizado por la organización en el año más duro de la crisis por el que hemos conseguido mantener intacta la labor social de integración y de crear empleo estable y de calidad. Y es que casi ocho de cada diez personas a las que emplea (77%) tienen algún tipo de discapacidad, colectivo que presenta una tasa de desempleo superior al 60%. En Andalucía, la organización generó 742 empleos (hasta sumar en la comunidad 24.341).
Sevilla fue, en comparación con el comportamiento andaluz y nacional, donde menos retrocedieron las ventas de cupones y del resto de juegos, que cayeron un 1,4%, hasta registrar unos ingresos de 133,94 millones. De esa cantidad, la mitad se repartió en premios (66,41 millones) en la provincia y otros 54,67 millones se destinaron a inversión social en educación, formación, empleo, actividades culturales y deportivas, entre otras iniciativas.
De esta manera, la ONCE devuelve a la sociedad más del 90% de lo que obtiene de ella, tanto en forma de premios como de reinversión social, apostilló Cárceles, que abundó que con la crisis los hábitos de los sevillanos respecto del cupón y otros nuevos juegos lanzados se transformaron de manera que el año pasado aumentó el número de personas que se animó a probar suerte, si bien también quedó patente que la frecuencia en la compra ha descendido.
La ONCE cuenta con una cuota de mercado del 7,4% en un sector que, según los datos del Ministerio de Interior de 2012, movilizó un total de 35.987 millones de euros. Esta cuota contrasta con el 46,53% que absorbe el juego privado (casinos, bingos y tragaperras), el 35,61% de Loterías y Apuestas del Estado y el 10,5% correspondiente al juego on line.
