La cascada de comunicados en contra de la permanencia de Carlos Vázquez en el Gobierno local después de haber participado en un piquete de carácter agresivo que causó daños en el mesón El Serranito, de Alfonso XII, la inició Aprocom. En un comunicado arremetió contra la permanencia del delegado no electo de Economía y Empleo en su cargo y contra el hecho de que aún no se haya disculpado. "Una semana después, no ha habido una respuesta clara", apuntaron los empresarios, que señalaron directamente al alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín: "Su silencio es cómplice y pone el pacto con IU por encima de los sevillanos".
Prácticamente a la vez, la asociación de hosteleros anunció a través de Europa Press que había registrado un escrito en el Ayuntamiento para reclamar el cese de Carlos Vázquez, como ya hizo el día después de la huelga. En ese documento, dirigido al propio delegado y al alcalde, anunció la declaración de Vázquez como "persona non grata": "Es la primera vez que ocurre en 33 años. Recomendamos a todos los asociados que esa persona no sea bienvenida en sus establecimientos".
Le siguió el PP, que había convocado un día antes para el mediodía de ayer, para difundir su propuesta de acuerdo remitida al consejo de administración de Sevilla Global. En el escrito presentado por urgencia por el edil Vicente Flores, se pide la destitución de Carlos Vázquez como vicepresidente de esta entidad encargada de la promoción empresarial, al quedar invalidado por su participación activa en los piquetes de la huelga. El documento, que se trasladará también al Pleno, no encontró respaldo alguno. PSOE e IU, los representantes de la Universidad de Sevilla y la UPO y los responsables de los sindicatos guardaron silencio. La Confederación de Empresarios de Sevilla, ni siquiera acudió a la cita -como ha ocurrido en ocasiones anteriores, según admitió la propia patronal- aunque luego mostró su apoyo a todas las declaraciones contrarias a Vázquez.
Mientras el PSOE mantiene su respaldo a Vázquez -del que sólo se ha distanciado claramente el candidato, Juan Espadas-, el propio delegado de Empleo volvió a salir ayer al paso. Defendió su participación en la huelga, negó su vinculación a cualquier hecho violento y ratificó su rechazo a un cese o a una dimisión: "Respaldo la huelga antes, durante y después de su celebración. Ése era el momento de estar al lado de los sindicatos y estaré ahí siempre que haya un evento de estas características. Se quiere criminalizar la huelga, pero ese guión del PP para reducir los márgenes democráticos contará con mi total oposición". crcr
Eso sí, Vázquez eludió entrar en otra confrontación verbal con los empresarios: "Mi actitud no va a cambiar y espero que se imponga el sentido común. Al final, habrá que ponerse de acuerdo".