Por primera vez en ocho meses, los precios no cayeron en su tasa interanual en noviembre, al situarse la inflación en el 0,4% -según el dato del Índice de Precios al Consumo Armonizado (IPCA) adelantado ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE)-, un punto más que la tasa registrada en octubre (-0,6%). La referencia de este mes es importante, ya que es la que utiliza el Gobierno a la hora de compensar una eventual desviación del IPC en las pensiones.
Por primera vez en una década los pensionistas no obtendrán una paga extra a principios de 2010. En años anteriores, el Gobierno había tenido que pagar el diferencial de la inflación respecto al 2% que establece siempre como objetivo, coincidiendo con la previsión del Banco Central Europeo (BCE), la misma tasa con la que el Ejecutivo actualiza las pensiones a principios de cada año. Las arcas públicas se habían visto deterioradas al tener que compensar la pérdida de poder adquisitivo. Sólo el año pasado, por ejemplo, el Ministerio de Trabajo destinó un total de 635 millones de euros a compensar a los pensionistas por la subida de la inflación, que se colocó en noviembre de 2008 en el 2,4% (cuatro décimas por encima del objetivo del 2%).
Sin embargo, este año saldrán ganando en lo que a poder adquisitivo se refiere, ya que el diferencial aplicado a principios de año (el 2% señalado anteriormente) es un 1,6% superior a la tasa de inflación registrada en noviembre (0,4%).
A falta de que se conozcan el dato definitivo el próximo 15 de diciembre -que puede variar décima arriba o abajo con el dato adelantado-, todo parece indicar que el IPC ha vuelto a tasas positivas debido, principalmente, al efecto de los precios de la energía, que llevaban tiempo muy por debajo de los registrados un año antes y que a finales del ejercicio son ya más altos que los de los últimos meses de 2008. Así, el precio medio del barril de Brent -de referencia en Europa- ha sido este mes de 77,62 dólares, frente a los 54,75 de un año antes.
Los expertos reconocieron que el aumento de la tasa de inflación armonizada ha sido mayor de lo esperado, aunque difirieron sobre las razones del repunte y, mientras la mayoría lo atribuyen al alza del crudo, otros ven ya una mejora del consumo.
La razón más optimista la dio a Efe el economista jefe de Intermoney, José Carlos Díez, para quien el repunte de los precios es una muestra clara de que la demanda interna se está recuperando, sobre todo, el consumo. "En una crisis deflacionista como ésta, la inflación es el mejor amigo", apuntó Díez, para quien los datos del cuarto trimestre mostrarán que España está saliendo ya de la recesión.
Por el contrario, María Jesús Fernández, de Funcas, achacó la subida de los precios a un efecto base del petróleo superior al calculado, al igual que Nuria Bustamante, de Caja Madrid.
Entre los políticos, división frente al dato conocido ayer. Así, la vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado, aseguró que confirma "una vez más" las previsiones del Gobierno. Mientras tanto, el secretario de Economía y Empleo del PP, Álvaro Nadal, aseguró que el repunte no responde a una recuperación del consumo, sino a un aumento de los precios del petróleo, por lo que equivale a "quitar dinero a los ciudadanos para dárselo a las compañías petroleras y a los países productores".
Por su parte, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, consideró que el retorno a tasas positivas podría suponer "un vuelco" hacia un nuevo escenario.
