La octava jornada de los Juegos Paralímpicos de Pekín se saldó con la consecución de otras tres medallas para España, todas ellas en la piscina del Cubo de Agua de Pekín, y la cuenta total de la delegación se sitúa en los 49 metales.
Un oro, una plata y un bronce fue el botín logrado por los nadadores Enhamed Enhamed, Xavi Torres y Déborah Font. La natación está siendo el pilar del éxito español, con más de la mitad de las preseas (26 de 49) logradas en esta disciplina.
Además, si hay que poner una cara al éxito del deporte español en los Juegos Paralímpicos ésta no puede ser otra que la de Enhamed Enhamed, el joven canario de 21 años que ya se ha colgado cuatro oros en Pekín.
El chico de oro de la natación, hijo de inmigrantes procedentes de El Aaiún, en el Sahara Occidental, ganó los 50 metros libre en categoría S11 con otra exhibición. En la final, Enhamed logró otro récord del mundo (25.82), rebajando la plusmarca que marcó él mismo en la sesión clasificatoria (26.34).
Se trata de su cuarta distinción de oro en cinco pruebas disputadas, "el mejor final para unas olimpiadas", según reconoció él mismo.
La medalla de plata corrió a cargo del veterano Vicente Javier Torres, quien logró su decimoquinta medalla paralímpica tras terminar en la final de los 150 metros estilos en la categoría SM4 sólo por detrás del neozelandés Cameron Leslie, que marcó un nuevo récord del mundo (2:33.57).
Finalmente, Déborah Font consiguió el bronce español de la jornada, tras terminar tercera en la final de los 50 metros libres femeninos en categoría S12 para deficientes visuales, con una marca de 28.23 segundos, en la que era su última prueba paralímpica.
