España es el país de la Unión Europea que envejece más rápidamente, según un estudio del Instituto de Política Familiar (IPF) en el que también se señala que serían necesarios "más de cien mil nacimientos anuales más para cambiar esta tendencia".
"La casi inexistente ayuda gubernamental a la familia y a la natalidad" es una de las principales causas del déficit de población juvenil actual y del envejecimiento poblacional existente, según detalló el presidente del IPF, Eduardo Hertfelder, en un comunicado de la institución.
El número de nacimientos en la actualidad, con una tasa de fecundidad de 1,37 hijos por mujer, "no alcanza el nivel de reemplazo generacional (2,1)" lo que -según añadió Hertfelder-, está provocando un "desequilibrio demográfico en España sin precedentes".
