Local

La población vuelve a caer en la capital tras tres años de alza

Pese a la pérdida neta de 1.177 habitantes, se mantiene aún por encima de los 700.000.

el 19 dic 2011 / 21:13 h.

TAGS:

Pese al descenso, Sevilla mantiene el cuarto puesto entre las capitales más pobladas.

La capital hispalense mantiene su cuarto puesto entre las capitales de provincia en función de su población, por detrás de Madrid, Barcelona y Valencia, pero al igual que todas ellas, los datos del padrón de 2011 revelan una caída después de tres años en los que la población creció. En concreto, Sevilla ha perdido este año casi los mismos habitantes que ganó en 2010, y su población total se mantiene por debajo de los niveles de 2009, según la revisión del padrón que acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística (INE) . Con todo, el balance final es de 703.021 ciudadanos, lo que garantiza que mantiene los 33 concejales (por debajo de los 700.000 habitantes se reducen a 31) y consolida los ingresos por transferencias estatales, que se calculan en parte en función de la población.

En concreto, la ciudad ha perdido 1.177 habitantes (lo que supone una caída del 0,17%), casi los mismos que ganó en 2010 (992). Desde 2007, cuando la población cayó en 5.269 ciudadanos, no se registraba un descenso demográfico (en 2009 creció en 3.447 y en 2008 en 614). Sin embargo, el descenso es de menor calado que el registrado en 2007 y, sobre todo, no tiene el efecto que tuvo entonces, ya que la pérdida de más de 5.000 habitantes que se produjo aquel año supuso bajar de los 700.000 habitantes, una cifra que no es meramente simbólica sino que tiene efectos económicos y políticos.

Desde que en 2009 Sevilla volvió a superar esta cifra, la población se mantiene por encima de ese límite, pero no hay que bajar la guardia porque lo cierto es que el descenso registrado este año ya ha situado el padrón municipal en cifras inferiores a las de aquel año, cuando se alcanzaron los 703.206 habitantes), y también se sitúa por debajo del padrón anterior a la caída de 2007, ya que en 2006, 2005 y 2004 se superaron los 704.000 habitantes, aunque el registro más alto que nunca se ha superado es el de 2003, cuando se alcanzaron los 710.000 vecinos.

El descenso no es achacable a un crecimiento vegetativo negativo, ya que en 2010, nacieron en la ciudad 7.589 niños y murieron 5.870 personas (la revisión del padrón se hace con las cifras de población a 1 de enero de 2011), por lo que el balance demográfico sigue siendo positivo. Tampoco se debe a un descenso de la población inmigrante, que sí se ha producido a nivel general. A diferencia de lo ocurrido en otras ciudades, en Sevilla, la población extranjera ha experimentado un aumento, aunque ligero, al pasar de 39.049 personas a 39.500, aunque su peso se mantiene en el 5,3%.

Por tanto, y teniendo en cuenta que en la provincia la población ha aumentado en 13.042 habitantes (excluyendo la capital), parece lógico pensar que ha habido un cierto trasvase de población entre la capital y, sobre todo, el área metropolitana, que sigue creciendo aunque en unos municipios el ritmo se ha ralentizado.

Andalucía. El descenso de población no es exclusivo de Sevilla. De hecho, hay siete capitales de provincia que han perdido más habitantes en términos absolutos (Valencia, Madrid, Tarragona, Barcelona, Valladolid, Santander y León).

Sevilla acorta distancias con Valencia, que lidera el desplome

Tampoco en la comunidad andaluza es una excepción, ya que solo Almería, Córdoba y Granada han crecido. Sin embargo, aunque en cifras absolutas es el mayor descenso, en términos porcentuales la caída es mayor en Cádiz y Huelva.

 La cuarta posición en el ránking de las capitales de provincia con mayor población no corre, de momento, peligro, ya que la inmediata competidora, Zaragoza, también ha visto mermado su padrón y se aleja cada vez más del club de los 700.000 vecinos que solo forman Madrid, Barcelona, Valencia y Sevilla, una cifra que garantiza más ingresos estatales y una corporación municipal más numerosa. Al mismo tiempo, Sevilla acorta distancias con la tercera capital, Valencia, no tanto por méritos propios como porque la capital del Turia es la ciudad que más población ha perdido en términos absolutos, en concreto 11.234 habitantes (un 1,39% menos) que la hacen bajar de los 809.267 vecinos a 798.033. Es la primera vez que la diferencia entre Sevilla y Valencia baja de los 100.000 habitantes.

No obstante, en términos porcentuales, la mayor caída es la registrada en Tarragona, cuyos 6.099 habitantes perdidos suponen un 4,35% menos de población de 140.184 a 134.085 habitantes). Por su parte, Madrid pierde 8.011 vecinos (se mantiene por encima de los 3,2 millones de habitantes) y Barcelona 3.889 (conserva los 1,6 millones). En ambos casos, la caída porcentual es superior a la de Sevilla, en concreto un 0,24%.

En términos absolutos, la capital hispalense es la octava ciudad que más población pierde, por detrás de las cuatro citadas y de Valladolid, Santander y León.

En total, de las 50 capitales de provincia (sin contar las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla), 26 crecen y 24 bajan. En términos globales, las capitales pierden 27.634 habitantes. En el grupo de las que crecen, solo tres aumentan su padrón por encima del millar de vecinos: Vitoria (1.315), Badajoz (1.189) y Lleida (1.029), y en todos casos se trata de ciudades medias. Los incrementos de población son menos acusados que los descensos. De hecho, en términos porcentuales, solo Ávila experimenta un aumento por encima del 1%, en concreto un 1,31% que se traduce en 763 abulenses más hasta alcanzar los 59.008.

 

  • 1