Más de un mes ha tardado la Policía Nacional en solicitarle al titular del Juzgado de Instrucción número 4, Francisco de Asis Molina, la autorización para realizarle el llamado test de la verdad a Miguel Carcaño, el joven condenado por el asesinato de Marta del Castillo. El magistrado ha recibido esta mañana la comunicación de la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Sevilla, pese a que se anunció la intención de practicar la prueba a principios de año y pese a que varios medios de comunicación publicaran incluso que la prueba ya estaba autorizada.
Según informó hoy el gabinete de prensa del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) en un comunicado, la solicitud de la Policía plantea la práctica de una prueba clínica del potencial evocado cognitivo, conocido como P300, y más popularmente como test de la verdad, a Miguel Carcaño, que cumple condena en la actualidad y que ha consentido previamente someterse a la misma.
El magistrado, que mantiene abierta una pieza separada abierta para la búsqueda del cuerpo de Marta, consultará tanto a la Fiscalía, como a la familia de la joven y a la defensa de Carcaño antes de tomar una decisión. Una vez que tenga sus escritos el magistrado resolverá, aunque por ahora ninguna de las partes ha mostrado su rechazo a esta prueba, pues el propio Ministerio Público anunció que no se opondría siempre y cuando Miguel se sometiera de forma voluntaria.
