La Delegación de Convivencia y tres de los sindicatos -UGT, CCOO y CSI-CSIF- aprobaron ayer el nuevo organigrama de la Policía, que plantea la creación de cinco sedes de distrito más y la reestructuración del servicio nocturno, que dejará de tener una unidad específica. El sindicato mayoritario se levantó de la negociación.
La Delegación de Convivencia y Seguridad y los sindicatos avanzan en la reestructuración de la Policía Local. Ayer, se acordó la revisión del organigrama, el paso previo a la definición de la nueva plantilla. Éste recoge la ampliación de los distritos policiales de seis a once, una propuesta realizada por la Delegación y que contó con el visto bueno de los sindicatos. La descentralización es uno de los ejes del nuevo modelo de Policía Local, que revisará por completo el actual funcionamiento de la unidad nocturna.
Según fuentes policiales, esta unidad -que se ha situado en el centro de la polémica en los últimos meses desde que los agentes realizasen un plante de protesta y no acudiesen a trabajar una noche- queda definitivamente fuera del organigrama. El servicio nocturno dependerá así de las 11 sedes de distrito. El objetivo es que éstas estén abiertas toda la noche, aunque este planteamiento sólo afectará a algunas de las sedes, según señaló el delegado de Convivencia y Seguridad, Alfonso Mir, a los sindicatos presentes en la negociación.
La propuesta aprobada recoge además la definitiva desvinculación del Centro del Grupo Giralda, que pasa a formar parte de la unidad especial junto con el Grupo Diana y la Línea verde. Desaparece finalmente la Oficina de Gestión de Atestados y se estudia que la unidad de inspección de accidentes pase a depender de tráfico. Se crea además la sección de protocolo que dependerá de Prensa.
Estas modificaciones contaron con el visto bueno de los sindicatos que participaron en la mesa de negociación, pero no del sindicato mayoritario del sector, el Sindicato Profesional de Policía, Sppme-e
Éste decidió levantarse de la sesión antes de su comienzo. El motivo, un desencuentro con Alfonso Mir. El sindicato reclamaba que se abordase de forma inmediata la necesidad de una ampliación de la plantilla, así como dos cuestiones denunciadas el día por el PP en una rueda de prensa. Por un lado, el coste de la productividad -la compra de descansos- los fines de semana y festivos -la oposición sitúa la cifra en 3,5 millones de euros, aunque en las negociaciones se ha barajado un cálculo de 9 millones de euros-. Por otro, el elevado número de días de descanso que se deben a la plantilla, unos 5.000, según los populares. Sppm-e quieren que antes de continuar con la revisión de la RPT se defina el número de policías que faltan.
