El Juzgado de Instrucción número 5 de Torremolinos (Málaga) acordó ayer la puesta en libertad de la directora de la Asociación para la Defensa y Protección de los Animales Parque Animal y de las otras dos personas detenidas el día anterior, acusados de los delitos de maltrato animal, intrusismo profesional, estafa y falsedad documental. La dueña, un veterinario y el encargado de gestionar la protectora tendrán que comparecer en los juzgados los días 1 y 15 de cada mes.
La investigación que inició hace tres meses la Guardia Civil, a petición de la Fiscalía de Medio Ambiente de Andalucía, desveló que los tres detenidos autorizaron y orquestaron el sacrificio "de forma continuada, masiva, deliberada e injustificada" de hasta 2.230 animales domésticos -principalmente perros y gatos- aplicando bajas dosis de medicamento letal, lo que les provocaba una muerte lenta.
La Guardia Civil informó ayer en un comunicado de que a la directora y fundadora de la protectora le imputan cinco delitos, entre ellos intrusismo profesional al inyectar a los animales un producto eutanásico sin estar en posesión de titulo para aplicar dichas inyecciones, y del delito de apropiación indebida por no devolver en el plazo de permanencia legal animales entregados en su centro para su posterior adopción. También le imputan falsedad documental supuestamente por falsificar la firma de veterinarios y hacer uso fraudulento del número de colegiado y el sello oficial en los listados de animales sacrificados e incinerados que remitía al Ayuntamiento de Torremolinos.
Por último se le achaca un delito de estafa, porque supuestamente seguía cobrando la manutención a los dueños de animales que ya habían sacrificado y por cobrarles todas las tasas que requiere la ley para practicar una incineración, que nunca se producía. Otro de los arrestados es un veterinario colegiado, a quien se le imputa falsedad documental. El mismo delito se le atribuye a otro profesional que, por el momento, no ha sido detenido.
El supuesto maltrato animal cometido por la directora y el encargado, F.B.G., consistía en sacrificios de animales con "muy bajas dosis de medicamento letal para ahorrar en costes, lo que causaba una muerte lenta y agónica", según el comunicado del instituto armado.
El encargado está imputado además de intrusismo profesional, al igual que la directora.
Los sacrificios masivos de animales se efectuaron entre el año pasado y éste y un veterinario que ejerció su actividad en la asociación lo denunció en junio pasado, lo que dio lugar a la actuación de los agentes del Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) del instituto armado. La asociación, que tiene un albergue en la Avenida de San Antón de Torremolinos donde ayer se personaron los agentes, se creó en 1996 y se dedica a la recogida de animales abandonados y la búsqueda de dueños responsables que les proporcionen un nuevo hogar. En la investigación de la protectora colaboró el Colegio de Veterinarios de Málaga, que proporcionó asesoramiento a los agentes acerca de los procedimientos de sedación de animales. Miembros del colectivo están siendo aún investigados y la Guardia Civil no descarta nuevas detenciones, porque la operación continúa abierta.
