Pasan las temporadas y Frederic Kanouté continúa teniendo un enorme peso específico para el Sevilla. A sus 33 años, es, junto a Negredo -ambos con 18 goles-, su máximo realizador. Siempre ha sido imprescindible y ahora, en su sexta campaña defendiendo el escudo nervionense, continúa siéndolo. Y es que los números hablan por sí solos: cada vez que ausenta en Liga, el equipo es incapaz de ganar. La última prueba de este revelador dato se vio el pasado sábado en Mallorca.
Siete han sido los partidos de Liga sin Kanouté sobre el césped. El balance, muy pobre: 3 derrotas y 4 empates (4 puntos sumados). Por el contrario, cuando jugó (24 partidos), el bagaje fue de 13 victorias, 3 empates y 8 derrotas (42 puntos).
La primera ausencia del franco-malí se produjo en la cuarta jornada, en casa contra el Racing de Santander. El Sevilla no pasó del empate. Negredo marcó el único gol del partido (1-1).
Tampoco participó en la quinta, frente al Hércules. Ese día, el Sevilla perdió 2-0 y la derrota le costó el cargo al entonces entrenador, Antonio Álvarez.
Posteriormente, Kanouté volvió a las alineaciones y se mantuvo en el equipo hasta la 16ª jornada. El Sevilla visitaba el Santiago Bernabéu y cayó derrotado por la mínima (1-0).
Los problemas físicos del delantero habían sido hasta entonces el motivo de sus ausencias. Kanouté volvió al equipo y comenzó a tener nuevamente continuidad. La única excepción la vivió en la jornada 21ª. Ese día, el Sevilla jugaba contra el Deportivo en Riazor, cita que se perdió por sanción. Justo un partido antes había forzado su quinta cartulina amarilla para tener un respiro y afrontar la ida de semifinales de Copa contra el Real Madrid en óptimas condiciones.
Posteriormente, una distensión leve del ligamento deltoideo del tobillo impidió al delantero llegar en condiciones al choque contra el Málaga en el Sánchez Pizjuán. Jugó 45 minutos tras ver que el equipo era incapaz de hacer un gol. Pero no sirvió de nada. Es más: causó baja en los dos partidos de Liga siguientes: ante el Racing (derrota por 3-2 en los Campos de Sport) y frente al Atlético de Madrid (empate a dos goles) en el Vicente Calderón.
Su última ausencia se produjo el pasado sábado en el campo del Mallorca. El Sevilla marcó dos goles, pero no pudo llevarse finalmente los tres puntos. Kanouté, porque los números hablan, como sucede también en el caso de su compañero Jesús Navas, es imprescindible hoy por hoy.
PENDIENTE DE EVOLUCIÓN. El franco-malí, al igual que el extremo de Los Palacios, sigue con su tratamiento tras el regreso del plantel al trabajo. Kanouté hizo ejercicios de rehabilitación al margen del grupo y, según los servicios médicos del club, evoluciona positivamente.
La plantilla prepara desde ayer tarde el partido del próximo sábado contra el Getafe, tras descansar el domingo. La principal novedad fue el regreso al trabajo sobre el terreno de juego de Tiberio Guarente. El centrocampista italiano, lesionado de gravedad en una rodilla, se ejercitó durante 45 minutos en labores de readaptación de campo.
LA INCÓGNITA SE LLAMA JESÚS NAVAS. Por su parte, Jesús Navas continúa con su recuperación al margen del grupo, ya que siguen sus molestias en peroneos y gemelos, según el parte médico. El pasado viernes, al dar a conocer la ausencia del internacional de la lista de convocados, Gregorio Manzano se mostró preocupadoNo tenía claro si su lesión podría complicarse. Habrá que ver, por tanto, si el extremo llega en condiciones al sábado. Por el momento es una incógnita.
