Ocurrió justo lo contrario de lo que el PP predijo. La reforma de la ley del aborto pasó ayer su primer trámite parlamentario, después de que el PSOE lograra -con el apoyo de PNV, ERC, IU, ICV y parte de CiU- frustrar una moción de UPN que pretendía frenar la reforma de la norma.
Era una prueba para los socialistas, faltos de apoyos desde el 1 de marzo por su derrota en Galicia y su distanciamiento del PNV, y para la propia ley, muy discutida en las últimas semanas. El PP ha insistido durante la campaña europea en que el PSOE está solo en su intención de permitir, entre otras cosas, que las niñas de 16 años puedan abortar sin consentimiento de sus padres. Sin embargo, la amplia mayoría conseguida ayer por los socialistas dice lo contrario.
La moción, votada por 345 diputados, tuvo un total de 160 votos a favor, 183 en contra y dos abstenciones. El PSOE, PNV y ERC-IU-ICV votaron en contra de esta moción de interpelación urgente, mientras que el PP lo hizo a favor, UPyD se abstuvo junto con la diputada Celia Villalobos y los diputados de CiU, en virtud de la libertad de voto que les concedió el partido, votaron algunos a favor y otros en contra.
La moción del Grupo Mixto, presentada por el diputado de UPN, Carlos Salvador, instaba al Gobierno a posponer la tramitación de la reforma de la ley del aborto hasta que no se produjera una "reflexión sosegada y el enriquecedor debate social multidisciplinar que este tema merecen", algo que según el PSOE ya ha sucedido.
La diputada del PSOE y portavoz de Igualdad, Carmen Montón, dijo que la moción de UPN, "tan aplaudida por el PP", es una maniobra para entorpecer el proyecto de ley, aunque destacó que les ha salido mal.
Pese a que el PP había dado instrucciones de apoyar la moción de UPN, la secretaria cuarta de la Mesa del Congreso y diputada del PP, Celia Villalobos, no siguió la consigna marcada por el Grupo Popular y se abstuvo en la votación.
Sí siguió lo dictado la diputada popular Sandra Moneo, quien señaló que la reforma de la ley ha creado "una profunda fractura social" y que el Gobierno la ha defendido con "premisas engañosas" ya que hoy en día ninguna mujer va a la cárcel por abortar.
"Mi grupo está escandalizado" porque una menor de 16 años pueda abortar de espaldas a sus padres, dijo la diputada popular, que señaló que el Gobierno no llevaba esta reforma en su programa electoral.
El diputado Joan Tardá, por parte de ERC-IU-ICV, aseguró que esta moción sólo pretendía "distorsionar el proceso" de la tramitación de una ley para la que ya han anunciado que elevarán "el listón", pues no se van a conformar con lo previsto en el proyecto de reforma actual.
Los diputados del PNV, que pese a la distancia con el PSOE apoyaron a los socialistas, acusaron a UPN de haberse querido adelantar al PP en este debate para mostrar "la radicalización de su postura".
Mientras los diputados votaban, las asociaciones antiabortistas HazteOir.org y Derecho a Vivir, pusieron en marcha una campaña basada en el envío de cuatro e-mails por segundo a los 350 parlamentarios para que apoyaran la moción de UPN.