Local

La rentabilidad de la inversión en bicicletas

La cumbre mundial de Sevilla ofrecerá este medio de transporte como refugio ante la crisis y los recortes en la inversión pública

el 20 mar 2011 / 19:19 h.

TAGS:

Un usuario de la bici en una de las estaciones del Metro de Sevilla

Cada kilómetro de la línea 1 del Metro costó 36,5 millones de euros; los 885 metros de la ampliación del tranvía a San Bernardo requieren una inversión de casi seis millones de euros; los pasos inferiores de Los Arcos y de La Ronda del Tamarguillo para los coches cuestan casi 12 millones y cada viaje en Tussam tiene un precio para la empresa que supera los 1,5 euros. Frente a estos datos, los últimos 30 kilómetros de carriles bici –de los 127 existentes– han costado unos 350.000 euros de media y la red completa ha reportado 52.800 usuarios, de los que una tercera parte ha dejado el coche. El contraste entre estas cifras es uno de los ejes de debate de la cumbre mundial de la bicicleta –Velo-City– que arranca esta semana con presencia de representantes de decenas de ciudades. El mensaje que se promueve es claro: en época de crisis, la inversión en bici sigue siendo rentable.


“En Sevilla se han invertido 30 millones de euros en infraestructuras ciclistas y tenemos más usuarios que el Metro, que ha costado 658 millones de euros. En tiempos de crisis, la bici es la mejor inversión que se puede hacer, para la ciudad porque ahorra y para la ciudadanía porque gana”, resume el director del Velo-City, José Antonio García Cebrián. El presidente de la asociación A Contramano, Ricardo Marqués, tiene sus propias cuentas: “Cada viaje en Sevici tiene un coste real de un euro –que en el caso de Sevilla además depende de un contrato por el que JCDecaux gestiona los soportes publicitarios a cambio de quedarse con el servicio de alquiler de bicicletas–; cada desplazamiento en autobús le cuesta a Tussam entre 1,5 y dos euros; y cada usuario de la línea 1 del Metro tiene un coste para la empresa de entre 2,5 y 3 euros. La rentabilidad de la bici es incontestable”.


La organización del Velo-City añade a este discurso otra variable más: la posibilidad de desarrollar un sector económico vinculado a este medio de transportes. Según los datos que maneja la oficina municipal de la bicicleta, en los últimos cuatro años el número de comercios vinculados a la venta o reparación de este medio de transporte se ha triplicado en la ciudad, hasta el punto de que están registrados unos 35 establecimientos que trabajan con las bicis. En el inicio de la apertura de los carriles bici las ventas de las tiendas existentes aumentaron un 20%.


Pese a esto, ni la bici sobrevive a la crisis. La tienda de Fernando González lleva abierta desde 1924. Hace balance: “Al principio se notó. Venían a comprar bicis y a repararlas. Pero con la crisis las ventas se han resentido: han podido caer entre un 20 y un 30% en los últimos meses”.

  • 1