La rotura de una tubería del agua, y luego otra del gas, causada por una excavadora que trabajaba en la canalización de la promoción Patio de San Laureano obligó a cortar ayer durante toda la mañana Alfonso XII y Marqués de Paradas, y más tarde la entrada por Reyes Católicos, con el consiguiente atasco de tráfico en todo el Centro.
Una pala excavadora que trataba de contectar las tuberías de la promoción de viviendas del cruce de Marqués de Paradas y Alfonso XII se llevó por delante, a las diez de la mañana, una tubería del agua. El chorro llegó "a la altura del árbol" de la esquina, unos tres o cuatro metros, y se convirtió en un gran surtidor hasta que una hora después Emasesa logró frenarlo. Los trabajadores que a esa hora desayunaban en el bar La Gallega mostraban horas después los vídeos que habían hecho con sus móviles, en los que se veía el agua salir sin control.
Lo peor estaba por llegar: los operarios trataron de quitar el forraje que había sobre la tubería para ver dónde se había producido la rotura, pero dañaron una cercana conducción de gas, provocando un escape, según indicó uno de los trabajadores de la contrata encargada de los trabajos. La Policía Local y los Bomberos tardaron una hora en acordonar la zona, durante la que coches y peatones siguieron pasando por la obra, según numerosos testigos.
Las primeras indagaciones de los Bomberos apuntan a que la excavadora estaba trabajando sin los planos que indican dónde están las canalizaciones subterráneas de agua, luz o gas, según explicó el oficial al mando, José Luis Jiménez, que añadió que esas explicaciones son "básicas para saber dónde estás de pie". La empresa, sin embargo, alegó que sí los estaban consultando, pero que el ramal de agua con el que toparon no estaba dibujado.
Gravina
El corte del cruce obligó a impedir el paso de vehículos por Alfonso XII, la única salida natural que queda en el Centro, lo que rápidamente redundó en el colapso. Los agentes trataban de desviar a los conductores por Gravina, donde el atasco se mantuvo hasta que se restableció la circulación a las tres de la tarde. También se cortó el último tramo de Marqués de Paradas, lo que atascó Canalejas y la entrada por Reyes Católicos, donde el tráfico ya era intenso por la afluencia de compradores a los comercios. Sobre la una de la tarde, la Policía decidió impedir la entrada por Reyes Católicos para que no siguieran llegando coches que alimentaran el colapso, lo que redundó en largas colas en el puente del Cachorro, que llegaron a la A-49.
Mientras la Policía Local se esforzaba por regular el cruce de Plaza de Armas y todas las calles cortadas, los Bomberos mantuvieron el escape controlado, creando una cortina de agua para "disolver" el gas e impedir que se formaran bolsas, con riesgo de que estallaran, según explicó el oficial José Luis Jiménez. El bombero aclaró que el riesgo de "deflagración" se mantendría hasta que se cerrara la fisura del gas.
Gas Natural no llegó hasta 14.00 horas, y solucionó el problema en 40 minutos, aunque de forma provisional. A la espera de que se verificara que las tuberías eran seguras, la plantilla de la obra confiaba en poder retomar hoy las tareas de canalización.
